Presunto cumplimiento de ley

GUADALAJARA, JALISCO (15/MAR/2011).- Aunque desde 2009 el documental Presunto culpable se llevó las palmas en 15 festivales internacionales -cuya crítica destacó el valor de Layda Negrete y Roberto Hernández como abogados y productores de la cinta- fue hasta principios de febrero de este año que Cinépolis publicitó el filme como el primero que distribuye por ser, según la cadena, una denuncia con respecto al sistema de justicia de nuestro país, cuya expectativa de aceptación era alta.

Así fue, y las salas reportaron miles de cinéfilos, pero sólo hasta que Víctor Daniel Reyes Bravo, el testigo que apunta a Antonio Zúñiga como culpable sin ninguna prueba, interpusiera un amparo para que no fuera difundida su imagen, y la jueza décimosegundo de Distrito en Materia Administrativa del Distrito Federal, Blanca Lobo Domínguez, pidiera la suspensión temporal de la exhibición de la cinta.

No obstante y tras haber sido puesta fuera de cartelera por unos días, ayer Lobo Domínguez negó la suspensión definitiva, pero pidió que se protejan la imagen y los datos personales de Víctor Daniel Reyes Bravo.

No hay censura

La disposición de la jueza establece también que la instancia encargada de tomar las medidas necesarias para resguardar la identidad y los datos del testigo será la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía (RTC) de la Secretaría de Gobernación.

Ante tal escenario, es el documentalista y jefe del Departamento de Imagen y Sonido (DIS) de la Universidad de Guadalajara, Boris Goldenblank, quien en entrevista con este medio expresa lo que observa en el caso que enfrenta Presunto culpable en los tribunales. “Legalmente no es censura, pues no se dice que se debe prohibir por el contenido o que se debe cortar una parte, no es ésa la decisión de la jueza, ya que no se le pide a los productores que corten escenas o que cambien una parte del contenido”.

Goldenblank, director del documental Voces del subterráneo que aborda el caso de los mineros fallecidos en Pasta de Conchos y con 47 años de carrera en el género, afirma que “el documental es un instrumento de gran poder, y Presunto culpable es un trabajo que motiva a los jóvenes documentalistas a interesarse en la realidad, a buscar dónde nos equivocamos. El documental es un instrumento que puede sanar y mejorar nuestra vida, no es el único, pero es uno de los más poderosos”.

PARA SABER

A.- Hay una ley no escrita entre los cineastas, y en particular los documentalistas, de que cualquier imagen de un personaje debe ser sustentada por un escrito, y más cuando se trata de una entrevista o la exposición de una idea.

B.- No está establecido si se debe pedir permiso a todos, al juez, al culpable, al testigo, a los abogados y si hay público también, porque cualquiera que esté presente y se reconozca en la pantalla puede decir que no quería ser expuesto.

C.- Si se filma en un restaurante o en un tianguis es prácticamente imposible pedir permiso a todos los que salen a cuadro, no es común, tal vez por ello los productores pensaron que no era necesario tener la autorización del testigo.
(*) Declaraciones de Boris Goldenblank
con respecto a los documentales.

''Estamos ante una situación que no está contemplada en la ley, y no hay documentos que establezcan cómo debe tratarse un juicio en un documental'', Boris Goldenblank, documentalista.

EL INFORMADOR/ ALTAGRACIA LIZARDO MEDINA