Penélope Menchaca cuenta lo que hizo para alcanzar el éxito

VER NOTAS RELACIONADAS CON PENÉLOPE MENCHACA

CIUDAD DE MÉXICO.-Todo fue por un chiste. Así fue como la actriz Penélope Menchaca, nacida en México el 6 de agosto de 1968, se ha convertido en una de las conductoras más reconocidas de la pantalla chica.

Resulta que hace 10 años, promocionando el disco de Las Nenas, visitó un canal de Los Ángeles en donde el productor les pidió que contaran algo.

Penélope se acordó de un chiste en el que el Papa llega a México, le pide a su chofer que lo deje conducir y luego es detenido por la policía. Y lo contó actuando. A las pocas semanas, un ejecutivo le ofreció la conducción de un programa, que fue, precisamente, el exitosísimo Doce corazones, que llegó a transmitirse en su mejor época tres veces al día por Televisa. Todo un récord.

Penélope, exuberante y extrovertida, ha hecho famosa su palabra cuchiplanchando, neologismo que a la hija de Dolores Menchaca, directora del Ballet Folklórico de México, le ha dado tema para un libro que lanzará en agosto.

Hoy, la chilanga de 40 años, que es toda una personalidad en la comunidad latina de Miami, estrena 12 corazones rumbo al altar. Mediante juegos, castigos y el detector de mentiras para revelar secretos, un grupo de parejas pondrá a prueba su amor con el fin de ganar la oportunidad de casarse con todos los gastos pagados. Se trata de una propuesta tipo game show, en la que en cada emisión seis parejas competirán para tener un “bodorrio”, aunque después de las eliminatorias, quienes lleguen a la final decidirán si aceptan o no el casorio

“Mi nerviosismo de esa primera emisión no será nada en comparación con la del lunes, cuando se sepa si alguien la vio”, admite Menchaca a KIOSKO.

—Y pensar que todo lo que vives hoy, fue por un chiste...

—Ese día cambió mi vida por completo. Puede decirse que es el destino. Ya me había divorciado y tenía una niña de un mes y otra de nueve años. Había tenido un personaje pequeño en una telenovela (Siempre te amaré), que iba a crecer y de pronto llegó lo de la promoción del disco y tuve que decir que me iba.

Cuando le dije a Juan Osorio (el productor), se quedó mirándome y me dijo que por eso no contrataba cantantes, porque lo dejaban colgado (risas). Pensé que mi carrera de actriz estaba acabada y entonces cuando se dio lo de Los Ángeles dije: “ok, voy a contar el chiste, pero lo voy a actuar y así empezó todo.

—Las Nenas era un grupo que usaba moños, minifalda y los hombres estaban enamorados de ustedes, ¿fue una forma fácil de entrar al “showbis”?

No, nunca tuvimos un éxito, puedo decir que la gente no se acuerda de ninguna de los temas que cantábamos.

—Muchos dicen que ven el programa porque eres bella y por tus piernas...

La verdad es que me da mucho gusto, no me importa lo que digan, el caso es que vean dónde estoy, así quieran verme el dedo del pie (risas).

—¿Cuál ha sido la peor crítica que recuerdas en tu carrera?

—Cuando estaba con Las Nenas y no voy a decir quién, para no convertirlo en chisme, había alguien que nos hablaba muy cariñoso, nos trataba bien, pero atrás de nosotras hablaba mal de nuestro trabajo. Era poderoso en ese entonces.

—¿Cuál ha sido la entrevista más complicada que te tocó hacer en TV?

—¡La de David Copperfield! (el ilusionista). Y fue por mi ignorancia. Mi inglés era peor que el de ahora y le hacía preguntas que tenía escritas, pero no le entendía lo que me contestaba. Todavía me muero de la pena cuando me acuerdo.


— ¿Cómo defines el cuchiplancheo, que ya muchos dicen?

¡Es todo un arte! Ahora mismo está en producción un libro que sale en este mes de la mano de Santillana.

Es una guía de la A a la Z pasando varias veces por el punto G. Aunque, bueno, a los hombres les demos un mapa, por si no lo encuentran (risas). Son experiencias mías, de lo que he escuchado en los últimos años, también trae test, juegos, va a estar divertido).