Paty Cantú se libera de los estereotipos

CIUDAD DE MÉXICO (31/AGO/2010).- El amor de pareja motiva a algunos a escribir canciones; el desamor también impulsa a exponer los sentimientos que nos recuerdan los momentos inolvidables con un viejo amor; eso fue lo que impulsó a Panty Cantú en su nuevo disco Afortunadamente no eres tú. “Troné con mi novio después de una relación de cinco años y aunque esta canción (Afortunadamente no eres tú) no se la escribí a él, sí le escribí canciones de desamor  y de añoranza”.

Las relaciones de muégano han cambiado, dice Cantú. “La vida es muy diferente; el amor es más desechable, las relaciones más complicadas, los hombres son más descarados, las mujeres más incrédulas, por eso escribí estas canciones, en esta situación de soltería”.

En pleno siglo XXI aún hay tabúes en la sociedad y las relaciones abiertas o de distintos géneros, esta vez la solista hace que su música sea universal. “Mis letras son multiusos, sin género y reales, digo todo lo que pasan muchas personas, evidentemente aún hay muchos tabúes, lo digo por las relaciones entre personas del mismo sexo, pero creo que debería ser mucho menos controversial que hace 20 años. Hay un avance igual que el feminismo, se nos trata igual, pero todavía tenemos esos tabúes, también para las mujeres aún existe un poco de oposición a que trabajen”.

Evoluciona

Después de la desintegración del dúo Lu, el reto de la artista es que creyeran en su música siendo mujer. “Yo no vivo mi vida a través de tabúes, pero mucha gente sí lo hace contigo; haber estado en Lu, yo con un hombre, fue difícil, porque decían que él hacia todo y yo sólo adornaba. Me costó trabajo que tuviera credibilidad como compositora; creo que cada vez hay menos gente que tiene estereotipos hacia las personas”.

Después de ocho años de haber iniciado su carrera, Paty Cantú experimenta nuevos sonidos sin dejar la balada. “En Lu yo iba de alguna manera bajo la batuta de ‘El Cejas’ (Mario Sandoval); cuando nos juntamos fue tú y yo todo a ‘michas’, y él me parecía muy talentoso, y aprendí a componer a su estilo, pero mi necesidad de transmitir todo lo que quería decir fue cuando decidí reinventarme. En este disco traté de evolucionar un poco en mi sonido, no hacer sólo baladas y canciones de amor, aprendí a reírme de mí misma, a usar fusiones. Me dediqué a que el disco tuviera historias reales y sencillas, no compongo como algo de trabajo. Este es el primer disco que puedo decir que estoy 100% orgullosa, creo que es el mejor disco que he hecho en mi carrera desde que estuve en Lu hace ocho años”.