Natalia Lafourcade se quita las etiquetas

CIUDAD DE MÉXICO.- Errónea fue la idea de convertir a Natalia Lafourcade en una estrella juvenil; menos agraciado fueron los comentarios en catalogarla como una Avril Lavigne mexicana; Lafourcade, irreverente y atrevida, supo defender su insolencia musical para proponer melodías honestas “y sin catálogo”.

Estatura pequeña y en ocasiones cohibida en su charla, como si fuese una niña desconfiada, las características contrastan con la energía casi salvaje que derrocha en el escenario.Es durante su presencia en Huatulco que se anim a tocar varios temas.

Con todas las experiencias vividas y el drástico cambio de estilo, Natalia Lafourcade aún no sabe si ahora su nombre es un referente de calidad. “Yo ahora voy a tratar de hacer lo que me haga sentir bien y ya no me conformo con las cosas. No sé qué esperar, ni mis allegados saben lo que voy a hacer”.

Pero, ¿cómo surge este punto de vista, de dónde vino la nueva Natalia?
El mal de amores y un viaje que le cayó como medicina para el alma fueron los detonantes para que la cantautora regresara con una visión diferente de lo que deseaba hacer en su carrera, el Hu Hu Hu (suspiro del alma) de su disco. “Primero compuse en instrumental y luego empecé de nuevo a hacerlo con letra, porque no me gustaba lo que hacía en ese momento; hablé sobre lo que me inspiraba en mi alrededor y mis letras empezaron a agarrar otra estructura, otra manera de ser”.

Defiende su proyecto

La renovación tiene que ver con un aspecto de convencimiento personal. Natalia no tiene intensiones, por ejemplo, de ser un producto plástico o volver a ser catalogada como una estrella juvenil:  “Dicen que uno se hace de grupos selectivos. Para mí es un riesgo porque habrá gente a quien le guste o no. Yo sólo quise hacer un disco en el cual me sintiera cómoda y, sobre todo, orgullosa”.

Hu Hu Hu es el reciente material de la artista y a fuerza de ser sincera, indica que su sueño ya se hizo realidad con esta producción de estudio, pues fueron dos años de estar esperando, de “defenderlo” y de hacer lo que tenía en gana.

Explica que defendió su último proyecto como pudo, y esa persistencia es lo que la ha llevado hasta el punto de “revivir” su carrera: “Muchos esperaban que siguiera con una fórmula y cuando llegué con los demos, no sabían cómo reaccionar y me dijeron que presentara más canciones. Un día dije, estos son mis trabajos y no puedo ofrecer algo que no va a llegar”.

A decir verdad, comenta, hay melodías como Ella es bonita que prácticamente salvaron su loco proyecto. “Mi disquera alabó mi melodía y por fin tuvo algo en qué confiar al 100%”. Sin duda, una parte fundamental para conectarse con la tierra fue Meme, de Café Tacvba, a quien considera más que su cómplice: “Es muy humilde y su creatividad la tiene muy en claro. Él escuchaba y me decía, fue como un padre porque tenía muy claras las cosas y él me guió. Fue una manera diferente de trabajar con él, tuve bastante libertad”.

Natalia en pocos datos

* En el año 2000 lanzó su disco debut: Natalia Lafourcade, del cual se desprendieron los sencillos Busca un problema, Te quiero dar y En el 2000.

* La intérprete consigue varios premios MTV Latinos e incluso ganó un Grammy; además colabora para los soundtracks de las películas Amar te duele y Temporada de patos.

* Para 2005 Natalia y La Forquetina lanzan el disco Casa. Tendría un cambio diametral en su sonido.

* En junio de 2006 la banda anuncia su separación. Ella se va a Canadá. Cuando regresa lanza Las cuatro estaciones del amor, su primer disco instrumental.

La frase:
“Yo sólo quise hacer un disco en el cual me sintiera cómoda y, sobre todo, orgullosa”
Natalia Lafourcade, cantante