My Chemical Romance, en su mejor momento

ESTADOS UNIDOS.- Gerard Way, vocalista y líder de My Chemical Romance, lanza la primera piedra: “La canción Death before disco es la más grande que hemos compuesto”. Luego, el músico no escatima su modestia, y afirma que dicho tema es su propio Born to run, aquella pieza mítica que Bruce Springsteen “El Jefe” escribió en 1975.

Guardando distancias entre lo que significa Born to run para el rock y lo grandiosa que pueda ser la nueva entrega discográfica del grupo originario de Nueva Jersey, lo cierto es que éste se enfrenta a uno de los retos más importantes de su carrera: Reinventar su sonido.

Y es que después de las opiniones tan favorables que recibieron de su tercer disco, The black parade (2006), en el que muestran temas más elaborados con un sonido clásico y característico de los años setenta, la banda también conformada por Mikey Way, Ray Toro, Frank Iero y Bob Bryar enfrenta la meta de autosuperarse.

Para ello, el quinteto surgido en 2001 echó mano del prestigiado productor Brendan O’Brian, reconocido por su trabajo con figuras como el propio Bruce Springsteen, Bob Dylan, Pearl Jam, Neil Young y The Offspring, para renovarse, tarea nada fácil cuando se trata de un grupo estigmatizado como pop punk y emo y frecuentemente señalado por la crítica musical más severa.

En sus tres discos anteriores (I brought you my bullets, you brought me your love, Three cheers for sweet revenge y The black parade,) el quinteto trabajó con los productores Geoff Rickly, Howard Benson y Rob Cavallo, respectivamente.

Sin importar la opinión de sus detractores, Way ha declarado sobre su nuevo álbum, aún en producción: “Cada canción es diferente de las demás. Hay una que me electriza especialmente, se llama Death before disco. Para el grupo es un sonido totalmente diferente, no veo el momento en que la gente pueda oírla. Pienso que hemos escrito nuestra propia Born to run”.

Y con esa actitud, vienen a darle una vuelta a su carrera, y de paso, con la idea de arrasar en las listas de ventas.

Bien planeado

El trabajo de composición de esta cuarta entrega de la agrupación My Chemical Romance arrancó en mayo de 2008, una semana después de que terminara la gira de presentación de su disco The black parade (2006), con el que la banda visitó México.

El líder de la agrupación, Gerard Way, definió al nuevo material como “la más pura y destilada versión de My Chemical Romance. El foco está puesto en la melodía y las composiciones”.

Resulta curioso el abanico de comentarios que uno puede escuchar sobre la propuesta de la banda porque si bien para unos no es más que un grupo sobrevalorado que hace música para adolescentes, otros como el mismísimo Jerry Only (bajista y cofundador de Misfits) la ha tachado como “una propuesta interesante”, incluso sobre otras de agrupaciones ya consolidadas como Green Day y The Offspring.

Saben que lo mejor está por venir. My Chemical Romance deberá probarse como en su momento lo hizo Green Day, cuando dejó de ser sólo una banda más del llamado neo-punk para ganarse los elogios de músicos, público, productores y toda la industria musical por el trabajo realizado en American idiot.

¿Acaso My Chemical Romance mantendrá esa línea lírica que trata desilusión, tristeza y amor, aderezadas pero con un toque de venganza y oscuridad y que tan popular la han hecho entre niños y adolescentes? ¿Su nuevo álbum será otra vez conceptual tal como fue The black parade? Habrá que ver.