Mötley Crüe y su rock de alto voltaje

GUADALAJARA, JALISCO.- Hace 19 años, Mötley Crüe sacó el disco Dr. Feelgood, que hasta la fecha se mantiene como la mejor producción en la historia de la banda conformada por Vince Neil, Nikki Sixx, Tommy Lee y Mick Mars. Irónicamente al mismo tiempo que el grupo gozaba de su máxima popularidad, al vender seis millones de copias del álbum y de presentar una gira con llenos en todas las arenas donde tocaron, dio inicio la etapa más crítica para sus integrantes, en donde los conflictos internos estuvieron a punto de generar su desintegración. Sin embargo, pese a que estuvo muy cerca de la autodestrucción, Mötley Crüe vivió para contarla. Y mañana, presumiendo su nuevo material, Saints of Los Angeles, por primera vez se presentarán en Guadalajara, a partir de las 21:00 horas, en la Arena VFG, en donde sus fanáticos podrán disfrutar en directo de una de las bandas legendarias en la historia del rock.

Una década sin brillo
Tras exprimir al máximo el material de Dr. Feelgood, la misma fama y fortuna que Mötley Crüe experimentó estuvo a punto de evaporarse. En una década, el grupo vivió la salida y eventual regreso de dos de sus integrantes, además de sacar tres discos que pasaron con más pena que gloria en la memoria de sus fanáticos. El vocalista Vince Neil dejó al grupo en 1993, por diferencias con el bajista y líder de la banda, Nikki Sixx y en su lugar llegó John Corabi, ex-cantante del grupo The Scream y resultado de ello salió el disco Motley Crue en 1994, que eventualmente resultó ser un fracaso. “Pese a llenar en México (donde convocaron a 20 mil personas al Palacio de los Deportes), solamente requerimos unos cuantos shows en clubes para darnos cuenta de que era tiempo de volver a casa y reflexionar qué nos había pasado”, reveló Sixx en la autobiografía de la banda, llamada The Dirt. Luego Corabi fue despedido, y Neil regresó al grupo.
De nuevo con los cuatro integrantes originales, Mötley Crüe sacó el disco Generation Swine, en 1997, que arrojó división de opiniones en críticos y fanáticos al ser mucho más obscuro en letras, y con un sonido diferente al que se había convertido en sello de la banda.
El baterista Tommy Lee fue el siguiente en irse, en 1998, ya que quiso darle prioridad a sus proyectos en solitario, y posteriormente tuvo problemas legales. En su lugar llegó Randy Castillo, cuyo historial musical destacaba el haber participado con Ozzy Osbourne. La llegada de New Tattoo, en el año 2000, era la esperanza de recuperar el éxito de una década atrás. Era la “secuela lógica” a Dr. Feelgood, según afirmó el mismo Nikki Sixx, pero lo único que obtuvieron fue otro fracaso comercial.

El resurgimiento
Castillo murió víctima de cáncer en 2002 y los caminos de los integrantes de Mötley Crüe tuvieron rumbos diferentes. Hasta que a finales de 2004, Mags Revell, un promotor inglés, generó la idea de que la banda se reintegrara con los músicos originales. Había dos inconvenientes: la carrera en solitario de Tommy Lee, quien se mostró renuente de inicio, pero finalmente aceptó la oferta. Y la enfermedad degenerativa que sufría el guitarrista Mick Mars en la espina dorsal, que fue reparada con una cirugía que le permitió volver a los escenarios. Con la alineación original, Mötley Crüe hizo ruido de nuevo y de una forma que muy pocos olvidaron.
En soporte a su antología Red, White and Crue, se creó la gira Carnival of Sins en 2005, que durante año y medio recorrió el mundo con la temática de una función circense en dos actos, donde el primero incluía los viejos éxitos de la agrupación como Shout at the Devil, Live Wire y Looks that Kill y la segunda presentaba las canciones más recientes, dándole mucho peso a los sencillos generados de Dr. Feelgood.

La verdadera “secuela lógica”
A casi 30 años de su fundación, y con la gloria de antaño nuevamente de su lado, los integrantes de Mötley Crüe se dieron el lujo de presentar dos novedades para 2008. Primero, fue la salida de Saints of Los Angeles, el disco basado en su autobiografía titulada The Dirt, y en donde recuperan la esencia y la mística que alcanzaron con el Dr. Feelgood. “Todas las canciones suenan igual de fuertes, no hay ninguna mejor que otra, estoy muy emocionado al ver el producto final de algo en donde hemos trabajado muy duro”, confesó Sixx, previo a la salida del disco. Y la segunda sorpresa fue la creación de su propio festival, el Crue Fest, donde fueron la atracción principal de un cartel que incluía a grupos como Buckcherry y Papa Roach.
Pese a todos los obstáculos, la banda encontró la forma para seguir de pie. Y Guadalajara será mañana el siguiente punto donde se dará el espectáculo de la que muchos consideran “la banda más notoria de rock en la historia”.

• Mötley Crüe ha retado constantemente al destino.

Mötley Crüe en concierto / 3 de octubre, 21:00 horas / Arena VFG / Boletos de 208 a 550 pesos / Informes en ticketmaster.com.mx