Mel Gibson se interesa en drama vikingo

LOS ÁNGELES, ESTADOS UNIDOS.- Siempre en la búsqueda de guiones que relaten algo original, el actor y realizador Mel Gibson ya prepara su regreso a la gran pantalla para dirigir una cinta sobre vikingos, misma que pretende que sea protagonizada por Leonardo DiCaprio y cuyo guión correrá por cuenta de William Monahan, ganador del Oscar por Los Infiltrados.

“Se trata de una historia impresionante, creada con algunos de los mejores talentos cinematográficos del sector y estoy casi en la Luna por hacer esta película con Mel, Leo y Bill”, aseguró Graham King, productor de la cinta, a la revista Variety ayer lunes.

La película comenzará a filmarse a finales de 2010 y aunque a esta altura se desconoce cómo se distribuirá, Gibson y King han sabido sacar adelante sus otras películas fuera del sistema que ofrecen los grandes estudios de Hollywood.

King señaló que DiCaprio llevaba años interesado en participar en una película centrada en la cultura vikinga, por la que siente fascinación.

Una vuelta esperada
Lo cierto es que los vikingos representan, además de aventuras y violencia marítima, una nueva oportunidad para Gibson, de 53 años, quien recientemente se convirtió en padre por octava vez junto a una nueva pareja. Y es que el actor australiano estuvo desde 2006 apartado de los foros luego de haber sido arrestado conduciendo bajo la influencia del alcohol y desatar un escándalo mediático en Estados Unidos tras realizar comentarios antisemitas a los policías que lo detuvieron.

Su última película como director fue Apocalypto (2006), que relata la caída del imperio maya, una obra que encontró un éxito discreto en la taquilla. Mel Gibson se ganó a admiradores en el mundo entero como el héroe de la saga Arma Mortal y estremeció a las jerarquías religiosas con La Pasión de Cristo en 2004, cuando marcó un hito en la industria al hacer una campaña de iglesia en iglesia alrededor de los pueblos más remotos de Estados Unidos.

¿Quiénes eran los vikingos?
Los vikingos fueron un pueblo europeo que entre los siglos VIII y X aterrorizaron las costas de países como Francia, Inglaterra e Italia. Su fama como arriesgados marinos y brutales guerreros quedó grabada en diversos pueblos de la época, e incluso fundaron dinastías reales en las Islas Británicas, Dinamarca, Suecia, Francia e Italia.