Mary Poppins cumple sus 50 años

CIUDAD DE MÉXICO (27/AGO/2014).- “No puedo hacerlo: estoy embarazada”, esa fue la respuesta que Julie Andrews le dio a Walt Disney cuando éste irrumpió en el camerino del teatro donde representaba el musical “Camelot” para ofrecerle protagonizar una película que este miércoles cumple 50 años.

Se trata de “Mary Poppins”, libro escrito por P.L. Travers en 1934, que era el favorito de los hijos del magnate de la casa del ratón, quien no desistió de su “capricho” de tener a Andrews en su película y decidió esperarla, pese a que en esa época la actriz era poco conocida.

“Supercalifragilísticoespialidoso” es un término que se utiliza cuando no sabes qué decir y aunque en el texto original la palabra no existe, ha sido el himno que ha unido a millones de niños en medio siglo.

“Mary Poppins” apareció por primera vez en un libro en el año de 1934. Narraba una historia fantasiosa, familiar y tierna que le dio a Julie Andrews su primer y único Oscar, Esto por dar vida a una niñera de aspecto estricto pero llena de magia en su interior y capaz de transformar un mundo oscuro en un paseo lleno de color y música.

Como el resto del público de la actualidad, Disney no concebía otra persona para interpretar a “Mary Poppins”, pero lo cierto es que, a excepción de la reciente película “Saving Mrs. Banks2, poco se habla de la autora y del texto original.

El personaje de la institutriz se inspiró en una tía suya, Helen Morehead, que llegó para cuidar de ella y sus hermanas.

El icónico mango de la sombrilla de la niñera con forma de animal se inspiró en uno que la tía de la escritora tenía.

Cómo olvidar su maleta de viaje, de la que siempre sacaba objetos para sorprenderles.
“’Mary Poppins’ puede tener alguna influencia de mi vida, pero no está basado en mi infancia”, dijo en alguna ocasión la autora.

Al igual que lo señala la película protagonizada por Emma Thompson y Tom Hanks, “Mary Poppins” era ella misma, un personaje oscuro que cuando Disney llevó al cine lo suavizó para hacerlo entrañable y compatible con los niños.

Algo remarcable, es que el amor que la escritora sentía por su personaje hizo que rechazara en un principio todas las propuestas para su adaptación al cine.

Se dice que Travers no estuvo conforme con el filme que Disney hizo —razón por la que los siguientes libros no se llevaron a la pantalla grande—, pero de no haber sido por él, el universo de “Poppins” tal vez no hubiese traspasado las fronteras terrenales y artísticas.

Innovó en la manera de filmar; fue la primera en utilizar fondo de pantalla azul para mezclar imágenes reales y animación y ganó cinco premios Oscar.

La película forma parte de un selecto grupo de cintas de Disney, consideradas clásicas que se conservan en el registro del Archivo Nacional Fílmico de Estados Unidos.

Su éxito también llegó al teatro en 2004 cuando un montaje musical se estrenó en el West End para dos años más tarde llegar a Brodway y después de eso tener más de 24 montajes en el mundo; en 2012 llegó a México, donde tuvo una temporada de ocho meses.