Marco Treviño hace coincidir al destino

GUADALAJARA, JALISCO (09/AGO/2013).- Marco está metido en una historia de mafiosos de cuello blanco. De esas emergentes, nacida de las corruptelas mexicanas. El actor de Después de Lucía y Memoria de mis p… tristes protagoniza un trhiller televisivo al lado de Claudia Ramírez, firmado por Cadena Tres y Argos. Su relación con la productora Argos es antigua, con ella ha dado vida a personajes como Máximo en Las Aparicio, Santiago Marín en Capadocia y ahora Adolfo Altamirano en Fortuna. El personaje le gusta, un ser verdaderamente oscuro que simboliza la descomposición del Estado. Pero todo inicia mucho antes… El sentido de la carrera de este tapatío  tiene mucho que ver con el encuentro consigo mismo.

Marco Treviño salió de Guadalajara hace 12 años en busca de una oportunidad actoral. “No había manera de vivir” destaca, quien había trabajado con reconocidos directores de la región. Algo le faltaba. Había tutores que lo confundían porque su intuición siempre gritaba que era para el otro lado. El actor de Espectros (película realizada al lado de Paz Vega)  y de 180 grados no padece “divitis”, pero es muy pero muy exigente. Total de que llegó (hace 12 años) en su camión proveniente de Guadalajara a una capital donde su primera escena la compartió con Angélica Aragón y Claudia Lobo; luego en su constante hacer, se le develó el mundo. Admira y quiere a Simón Bross (el director de Malos hábitos) y agrace al teatrero argentino Rafael Garzaniti (radicado hace años en Guadalajara, hoy en Argentina) haberle abierto los ojos.  

Treviño se fue de Guadalajara “salí huyendo de una jaula moralista y cerrada”, dice este oriundo de Ciudad del Sol, “rompí con mi educación, con la doble moral y con una religión que no me corresponde”.  Hoy por hoy, extraña La Fuente, sí, la cantina. También Chapala, Mazamitla y Tapalpa. Llegó al DF y participó en la novela Todo por Amor, 15 capítulos, luego colaboró con Telemundo y en varias películas bajo la dirección de Simón Bross y Maryse Sistach. Recientemente participó en Paramédicos, de Lemon Films. ¿Argos? La gran ventaja, dice, es que dicha productora —bajo la tutela de Epigmenio Ibarra— “me permite ser congruente”.

—“Adolfo Altamirano”, el personaje dueño de casinos que encabeza “Fortuna” ¿qué significa?

—Este personaje simboliza los grupos de poder en todo el mundo, los valores que rigen la vida económica de un país. No creo que haya un país donde este tipo de cosas no se relacionen como favores y comisiones. Mordidas y tranzas tan de México, y esto viene desde la época de la Colonia, no es privativo del PRI; el PRI perfeccionó el mecanismo, pero esto lo heredamos, el PAN trató de desarrollarlo y el PRD pues tiene toda la escuela del PRI.

—Desde que interpretas a un “malo”, hasta las revistas te ven guapo.

—Es muy interesante lo que me pasó. Cuando me vine a México —después de actuar en Guadalajara por años— para nada me sentía galán. Y resulta que poco a poco me llegan personajes seductores (como Máximo), atractivos.  En la telenovela Mientras haya vida intérpreté al doctor Riverol y resultó un sexsymbol para las señoras, porque era noble, protector, buenazo.  Adolfo Altamirano es atractivo, porque es muy aspiracional.

—Mencionaste alguna vez que querías montar la obra de teatro “La Secreta Obscenidad de Cada Día”.

—El teatro, de  manera cíclica, esporádica, me regresa a las raíces, creo que el mejor taller de actuación está en el teatro, bueno, también en la televisión, pero en la televisión no cualquiera puede resolver una escena en 10 minutos. El teatro te ayuda a recordar procesos y reconectar con el público. La Secreta...  de Marco Antonio de la Parra es un texto divertido que habla sobre la libertad y la consciencia del individuo, es oportuna para México, que hoy vive tanta violencia y hace falta que hagamos equipo, nación.

De cerca

Miedo: Evita daños

PASIÓN: Actuar

BEBIDA: Relación cordial

Milagro: Mi vocación

Accidente: Coincidencia

Destino: Existe

Ruptura: Educación

Actores que han marcado su vida

Claudia Lobo

Liza Owen

Demian Bichir

Damian Alcázar

Jesús Hernández

Rodolfo Garvel

Roberto Espejo