Maquinaria, un festival gutural

GUADALAJARA, JALISCO (04/NOV/2012).- El reverendo mitad diva, mitad asesino serial, Marilyn Manson, hizo del Maquinaria Festival su show dopado, con sus temas que a más de un conservador perturbaron desde los años noventa. Desde ''Disposeable Teens'' hasta su cover de ''Sweet Dreams'' hicieron rememorar sus polémicos discos llenos de crítica social. Mas a pesar de dar un buen ''show'', la gente se impacientaba, pues querían escuchar ''World Painted Blood'' o ''War Ensemble'', temas que atrajeron una ola de seguidores hacia Slayer, la banda principal en el lineamiento del festival.

Al inicio del encuentro, a las 16:00 horas, como una oleada de agua turbia fue llegando el público a la Explanada López Mateos. Negro en las camisas, negro en las chamarras de cuero que protegen del frío que trajo este sábado y negro alrededor de los ojos. Poco a poco la oscuridad en la estética de los seguidores del metal fue acercándose al escenario que inauguraron los regios de Maligno.

Y para las 18:00 comenzaron a volar puños. Como Moisés con el Mar Rojo, Max Cavalera separó al público ante sí con un gesto de sus brazos. Les marcaba el perímetro circular al que se debían adaptar. Todos estaban a la expectativa de que comenzara la música y fue entonces que entró el doble bombo de Igor Cavalera para detonar la furia. Así fue que ''Cavalera Conspiracy'' armó el slam en el Maquinaria. Y comenzaron a volar puños.

Luego, un cartelón subió por todo el escenario. Al unísono, la gente lo recibió con un grito. Una bestia con los ojos inyectados de rojo, con el chipo ensangrentado y la mirada perdida entre la ira y el dolor anunciaba a una de las bandas más esperadas del Maquinaria Festival. Entre sus cuernos se leía el porqué todos se entusiasmaban: era ''Mastodon'' los que estaban por subir y hacer, al igual que las otras cuatro bandas, que todos movieran sus cabezas siguiendo el gutural sonido que emitían las bocas de sus vocalistas.