Mala Rodríguez conquista a los tapatíos

GUADALAJARA, JALISCO.- Después de una intensa jornada musical que incluyó a más de 40 propuesta musicales de distintos géneros como rock, jazz, samba, reggae, fusión, infantil y electrónica, que desde las 14:00 horas del pasado sábado llenaron de música las plazas de la Liberación Universidad, Fundadores y el Laboratorio de artes Variedades, como parte de la versión tapatía de la Fiesta de la Música, aún faltaba el magno cierre de actividades, mismo que correría a cargo de la intérprete española Mala Rodríguez, programado para 24:00 horas del pasado sábado.

Cuando las manecillas marcaban esa hora y la audiencia esperaba ansiosa a la artista, en vez de presentarse a escena la visitante española, inició la instalación de instrumentos de la banda tapatía Radaid, programada para las 23:00 horas. El retraso en el evento se dió por “cambios y ajustes de último momento” según explicaron los organizadores, pero el público para esas horas se encontraba cansado, confundido y sufriendo del súbito frío que se hizo presente en el centro de la ciudad.

De igual manera los tapatíos de Radaid se presentaron para complacer a la gente y calmar sus ansias, aunque en un principio no obtuvieron buena respuesta, ya que la audiencia no paraba de chiflar y emitir el grito “Mala, Mala”, pero esto pareció no desaminar a los músicos quienes buscaron de interactuar con los jóvenes haciéndolos aplaudir, llevando un ritmo o bailar, mientras presentaban varios temas de su repertorio y algunos de su nuevo material titulado L’Intent. Así después de varios intentos por medio la fusión sonora de sus instrumentos y mucha paciencia se despidieron entre aplausos de la escena poco después de la 1:30 del domingo.

Después en un lapso de confusión, incertidumbre y frío, la audiencia se preguntaba “si había valido la pena la espera y si llegaría la Mala al concierto”, la respuesta fue satisfactoria ya que minutos después de las 2:00 de la madrugada apareció en escena la cantante española acompañada de un DJ y una corista para compalecer al público por poco más de una hora con temas de sus producciones Alevosía, Lujo ibérico y su reciente albúm Malamarismo. Así, ante cientos de fieles seguidores la cantante brincó juntó con ellos por primera vez en la ciudad, para después depedirse complacida y dejando a una audiencia satisfecha después de un largo período de espera.