Machete cosecha aplausos en Morelia

MORELIA, MICHOACÁN (17/OCT/2010).-   Políticamente incorrecta y por momentos con violencia extrema, además de repleta de chistes racistas y un elenco de primera línea. Dichos  elementos se unen y dan forma a Machete, la película más reciente de Robert Rodríguez, que se exhibió ayer a la prensa y a la crítica en Morelia, donde logró aplausos.

El hecho de ser bien recibida por el público crítico tiene su mérito, toda vez que ayer también se exhibieron Biutiful (con Javier Bardem como protagonista) y Somos lo que hay (con Paulina Gaytán en uno de los papeles estelares). Ambas películas cosecharon opiniones diversas, pero fue la obra más reciente de Robert Rodríguez la que con su desparpajo logró hacerse con el favor del público reunido.

Machete, protagonizada por Danny Trejo, cuenta la vida de un agente federal que busca venganza del hampa mexicana y estadounidense. En su accidentado camino a la redención, el justiciero encontrará aliados inverosímiles, como Jessica Alba (quien encarna a una agente migratoria) y Michelle Rodríguez (encarnando a una inocente vendedora de tacos), pero también se las verá con un peligroso narcotraficante mexicano (actuado por Steven Segal) o un político corrupto y con un profundo odio por todo lo que sea latino (Robert De Niro).

Acción a raudales

La película no da ni pide tregua en ningún momento. Las escenas de pelea presentan las usuales exageraciones de Robert Rodríguez, con miembros cortados, balaceras de larga duración y explosiones que destruyen todo a su paso, salvo al protagonista.

Quienes tengan la piel sensible calificarán como fuertes  las burlas de Rodríguez. Los mexicanos son siempre retratados en trabajos como repartidores de comida, jardineros, sirvientas y albañiles, mientras que los estadounidenses en esta cinta se aprecia como individuos fanáticos, violentos, torpes y llenos de maldad.

Un factor interesante fue el elenco que logró amalgamar el cineasta, al convocar por igual a consagrados como De Niro o a famosas más conocidas por sus escándalos que por su trabajo, como Lindsay Lohan.

La película tuvo una recepción mixta en Estados Unidos, donde se percibió como una crítica mordaz a la poca tolerancia del sistema legal estadounidense, pero también como un trabajo donde se hiere la sensibilidad al no dejar “títere sin cabeza”, pues el director se mete igual con políticos, policías y médicos, incluso con la iglesia.

Por cierto

La historia de cómo nació el proyecto de Machete es un tanto curiosa. La cinta era un tráiler en broma (un adelanto fílmico) sin intenciones de ser rodado por Robert Rodríguez. Sin embargo el tráiler de apenas dos minutos se ganó al público que envió miles de peticiones al cineasta para que dotara de vida al proyecto.

EL INFORMADOR/ FRANCISCO GONZÁLEZ RODRÍGUEZ