Los Pitufos invaden la ciudad

GUADALAJARA, JALISCO (04 /AGO/2011).- La película de Los Pitufos no necesita una gran campaña publicitaria (aunque sí la tiene) para convocar a la gente a que asista a las salas de cine. La nostalgia es la maquinaria de promoción más poderosa, y los personajes azules la tienen a su favor. Con ella, toda una generación que saben en qué tonada se debe interpretar la canción de Los Pitufos, que sus casas eran hongos huecos, que todo lo comparten, que se deben cuidar de Gárgamel y que su bebida favorita era el jugo de pitufresas.

Los “suspiritos azules” llegan a la pantalla grande cuando parecía que sus mejores años ya habían pasado en la pantalla chica, aunque no han dejado de estar vigentes gracias a las repeticiones que los han eternizado en la televisión.

Creados por el escritor Pierre Culliford, mejor conocido como “Peyo”, Los Pitufos, pequeños seres que habitan en una aldea oculta en el bosque y que visten sombrero y pantalones en color blanco, se caracterizan por tener aventuras donde el trabajo en equipo, la honestidad y la búsqueda del bien son los principales motores para que siempre salgan victoriosos.

Vivir en el bosque tiene como gran inconveniente que todo el tiempo se encuentran vigilados por el malvado Gárgamel, un torpe mago cuyos planes para atraparlos y “extraer” la esencia azul de los personajes generalmente termina en desastres.

La película saca a los personajes de su campirano ambiente y los pone en la selva... pero de concreto, al llevarlos a la Gran Manzana para vivir una serie de aventuras al lado de los humanos.

De paseo por Nueva York
La película lleva a Los Pitufos a enfrentar sus peores temores, con Gárgamel acechándolos en Nueva York, ciudad a la que llegan accidentalmente y de la que tratan de escapar para volver a su aldea. Sin embargo, los personajes habituados a lugares campiranos pronto quedan fascinados por la moderna urbe, mientras que las personas que viven allí se preguntan de dónde salieron esos curiosos duendes en color azul.

Papá Pitufo, Pitufo Valiente, Pitufo Gruñón, Pitufo Tontín, Pitufo Filósofo y Pitufina serán quienes lleguen a la “ciudad de los humanos”, donde encontrarán que no todos son tan temibles como Gárgamel, y también que hay todo un mundo por descubrir.

La cinta dirigida por Raja Gosnell se estrenó la semana pasada en Estados Unidos, donde logró imponerse en la taquilla por un estrecho margen, lo que deja patente que el concepto creado por Peyo en 1959 sigue más vigente que nunca.

Para Pitufosaber
La caricatura de Los Pitufos tuvo 420 episodios de 1981 a 1990. Sólo Los Simpson, Los Picapiedra y Scooby Doo tienen más episodios.

En 2005 los personajes protagonizaron una polémica campaña de la UNICEF donde su aldea era bombardeada. La campaña pretendía crear conciencia y reunir fondos para la rehabilitación de niños soldados en África.

En la década de los años ochenta surgieron varias leyendas urbanas entorno a Los Pitufos. Fueron señalados como “maléficos” y hubo quien decía que su éxito se debía a un pacto con el diablo.

¡Los atraparé aunque sea lo último que haga!
El torpe mago Gárgamel es encarnado en la película de Los Pitufos por el popular actor de doblaje Hank Azaria, en cuyo extenso currículum se encuentra su trabajo en Los Simpson, donde le ha dado voz al cantinero Moe, al jefe Gorgory y Apu durante las 22 temporadas que ha durado el show.

En la película encarna al villano y cazador de Pitufos, quien quiere atrapar a los pequeños personajes para usar su esencia y hacer su magia mucho más poderosa.

Azaria se tomó en serio su trabajo como Gárgamel y no dudó en cambiar su aspecto físico para asemejarse al dibujo animado. Soportó largas horas de maquillaje, las prótesis en las cejas y sobre todo: Se rapó todos los días que duró el rodaje para lucir la brillante calva del villano.

A lo largo de la cinta no faltará la oportunidad de que el hechicero grite la frase que lo inmortalizó en la caricatura: “Cómo odio a esos Pitufos. Los atraparé, así sea lo último que haga!”.

''Los Pitufos son una analogía para una nación. Enfatizan los valores familiares y la importancia de cooperar. Siempre ven lo mejor de la gente primero, se cuidan y se preocupan unos por otros'', Jordan Kerner, productor de Los Pitufos.

Pitufo Filósofo, algo presumido. Siempre con una frase que decir.

Pitufina, la chica perfecta. Es la voz de la razón en el grupo.

Pitufo Valiente, sin temores. Se preocupa siempre por los demás.

Pitufo Tontín, el distraído. Sus descuidos ocasionarán grandes problemas.

Pitufo Gruñón, con mala actitud. Su boca retorcida atemoriza a los malosos.

PapÁ Pitufo, la sabiduría. El patriarca de la aldea.

Gárgamel. Busca la esencia de los pitufos para ser más poderoso.

EL INFORMADOR/ FRANCISCO GONZÁLEZ