''Las mariposas de Sadourní'' se muestra en el FICG

GUADALAJARA, JALISCO (04/MAR/2013).- ''Las mariposas de Sadourní¿¿ (Argentina-Italia-Reino Unido), filme que compite en la categoría de Largometraje Iberoamericano de Ficción, se presentó a las 09:00 horas en la Sala Ernesto Gómez Cruz, de Expo Guadalajara, durante el cuarto día de actividades del Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG).

La cinta, de 93 minutos de duración, cuenta la historia de Hermes Víctor Sadourní, un hombre de 33 años, complexión robusta y 128 centímetros de estatura que, tras cumplir en prisión la mitad de una condena de 20 años, obtiene su libertad gracias a un régimen de salidas que pretenden que el encarcelado se reintegre en la sociedad.

Sadourní trabaja con Alexia -una estrella porno- en un tugurio cuya dueña, Vanesa, considera al porno un subgénero del cine de suspenso. Una de las inquietudes del "enano" es crecer. Estirar su cuello, sus manos, sus piernas. Por eso pide ayuda al doctor Simonki, un traumatólogo inexperto y sombrío que lo somete a fórmulas experimentales no exentas de dolor y mala intención.

Posterior a la función, Darío Nardi, director de la película, dijo que la cinta fue resuelta en etapas y lo primero que pudieron encarar fue el preludio --siete minutos y medio de la película--, en los que se planteaba qué era lo que había llevado al protagonista a cometer una serie de crímenes que lo confinaron a prisión durante un periodo de diez años.

"Lo curioso fue que al cabo de la realización de ese preludio, que usábamos como una forma de mostrar cuál era la estética, la dinámica, la gramática de la película".

Contó que el proyecto se detuvo por 10 años debido a cuestiones políticas en Argentina. Sin embargo, Nardi acentuó que esa pausa ayudó a que Christian Medrano, protagonista de la película, envejeciera a la par de Sadourní, que en el preludio había pasado 10 años en prisión. Cuando retomaron los trabajos, ni siquiera hubo necesidad de maquillarlo.

"Se fue desarrollando visualmente el proyecto, haciendo un casting previo, tomando decisiones estéticas muy precisas, entonces cuando llegó la hora de filmar era prácticamente ejecutar lo que se había previsto con tanta anticipación".

Resaltó que la estética de la película tenía que ver con Sadourní, quien purga condena en un país que no es el suyo y cuando recupera la libertad está desfasado en el tiempo y el espacio.

"Era una manera de marcar esa especie de anacronismo. Tenía que ver con elegir una estética en donde la ciudad no necesariamente es una ciudad específica. Es una ciudad creada. Es una mezcla mitad europea, mitad latinoamericana y en un estado a veces de conservación no ideal. Es muy difícil especificar en qué tiempo ocurre la película y también es como innecesario hacerlo".

Filmada en 35mm, Nardi agregó que la película contó con la participación de Alberto Ponce, cuya participación en la edición cambió su perspectiva de que editar una película era un mero trabajo de ensamble.

Puso de relieve el apoyo de la artista plástica Nicola Constantino, quien generosamente les prestó frisos, vestuario, video y escultura de su creación para armar algunas escenografías de la película.

''Las mariposas de Sadourní''' se proyectará el martes 5 de marzo a las 16:00 en el Cineforo de la Universidad de Guadalajara; el miércoles 6 a las 18:30 en la Sala 3 del Cinépolis del Centro Magno, y el jueves 7 a las 21:30 en el mismo espacio.

EL INFORMADOR / GONZALO JÁUREGUI