La lección de valor con ''Cinco de mayo: La batalla''

GUADALAJARA, JALISCO (01/MAY/2013).- “Es hora de que vayamos al cine y vitoreemos a nuestros propios héroes. Es momento de recordar que nosotros tenemos nuestras propias leyendas”. Quien habla es Rafael Lara, director de la película ''Cinco de mayo: La batalla'', largometraje que narra el choque entre el ejército mexicano y el francés en 1862, y que quedó grabado con letras de oro en la historia de la patria.  Para el realizador, es un capítulo del país que merecía ser llevado al cine.

La cinta llega este viernes a las pantallas mexicanas, con Kuno Becker en el papel de Ignacio Zaragoza, el rostro más visible de aquella victoria del ejército mexicano. Pero en la historia que presenta Lara, hay otras aristas a explotar.

Primero, el director deja en claro que la película no es una “lección de historia”. Los hechos que se cuentan ocurrieron, ciertamente, pero se agregan dramatizaciones y personajes que ofrecen otros ángulos de la historia. “La verdadera protagonista de la película es la batalla en sí”, explica el director.

Y es que si algo inflama de orgullo a los productores del filme, son las secuencias de batallas. Más de 800 extras, 100 caballos y semanas de rodaje fueron necesarios para darle forma a las escenas bélicas. “Quedaron muy bien, pese a que teníamos pocos recursos para hacerlo”, agrega Lara, que no se cansa de decir que, si bien es una de las películas más caras del cine mexicano (costó 80 millones de pesos), “es en realidad, muy, pero muy barata, comparada con producciones del mismo calado, pero hechas en Estados Unidos.

La voz del pueblo

Elevado a los altares de la patria como un héroe sin parangones, el Ignacio Zaragoza que aparece en la película no es el héroe perfecto de bibliografía de escuela y de billete de 500 pesos que todos los mexicanos solemos ver. “Aquí todos los personajes son humanos, que aciertan y se equivocan. No hay necesariamente buenos y malos”, explica Lara.

Uno de esos “héroes anónimos es Juan, papel de Christian Vázquez y que, de acuerdo al propio actor “le da cara a los anónimos, a la carne de cañón que peleó en el Ejército de México sin saber por qué o para qué”.

Vázquez confiesa que quedó seducido por el proyecto cuando le fue presentado. “Yo de historia conocía poco antes de comenzar el rodaje, lo reconozco, y no fui muy bueno en esa material en la escuela, pasaba con lo básico (risas)”, afirma el histrión.

“A mí me gustaba la materia, pero en mi tiempo se les veía a estos personajes como héroes perfectos, y no lo son”, agrega Liz Gallardo, Citlalli en la película, una mujer que se ve arrastrada al conflicto sin quererlo.

“Me sorprende lo poco que se habla de las mujeres en estos hechos históricos. De hecho, en la historia oficial no se menciona a ninguna, ¿qué, acaso no hubo? Creo que ese es un error que se subsana en la película”, agrega Gallardo sobre su personaje, que si bien es ficticio, retoma el espíritu de las soldaderas, mujeres que lo dejaban todo con tal de acompañar a sus maridos al campo de batalla.

Tanto los actores como el director coinciden en que ''Cinco de mayo: La batalla'', es una película diseñada primordialmente para entretener, pero también para reflexionar sobre el significado de ser mexicano. “Audiencias de otros países que han visto la película en festivales salen emocionadas, y nos han dicho ‘después de verla, quiero ser mexicano’, creo que eso habla mucho del mensaje que nosotros queremos ofrecerle al público”, remata Lara.

MÉXICO EN CINE

La historia según el celuloide

Los 200 años de historia de nuestro país han sido una fuente constante de inspiración para los guionistas cinematográficos. Sin embargo, son dos las etapas que se han explorado de forma profusa en la pantalla: La Revolución y la Independencia.

> ''¡Viva Zapata!'' (1952): Épica producción hollywoodense de Elia Kazan, donde se presenta un retrato idílico de la Revolución, con los escenarios fastuosos propios de la industria norteamericana.

En esta cinta, donde se privilegia la ficción sobre la historia, participan leyendas del cine anglosajón, como Marlon Brando (Zapata), Anthony Quinn (Eufemio) y Alan Reed (Pancho Villa).

> ''Zapata, el sueño del héroe'' (2004): La polémica visión de Alfonso Arau sobre el caudillo de la Revolución Mexicana recibió un sinfín de críticas durante su estancia en la cartelera comercial, por la visión chamánica, superflua y lúdica de Zapata.

En el elenco aparecen consagrados del videoclip y las telenovelas como Alejandro Fernández (Emiliano Zapata), Lucero (Esperanza) y Jaime Camil (Eufemio Zapata).

> ''Hidalgo: La historia jamás contada'' (2010). La película de Antonio Serrano muestra a un cura Hidalgo bohemio, amante del teatro y que vive en un círculo intelectual, muy lejos de la imagen que se muestra en las estampitas que se venden en la papelería.

La película reunió a la crema y nata del cine nacional, con Demian Bichir (Hidalgo), Andrés Palacio (Morelos), Ana de la Reguera (Josefa) y Raúl Méndez (Allende).

> ''Morelos'' (2012): Segundo acercamiento de Antonio Serrano a Independencia, ahora enfocando su atención en los últimos años de José María Morelos, en una cinta estrenada a finales del año pasado y que tuvo un paso discreto a través de las pantallas comerciales. Para relatar su historia, la cinta convocó a histriones como Dagoberto Gama (Morelos), Andrés Montiel (Agustín de Iturbide) y Raúl Méndez (Mariano Matamoros).

> ''Cristiada'' (2012): Con una selección panamericana de actores interpretando, en teoría, a puros mexicanos, Hollywood ofrece su visión de la Guerra Cristera, bajo la dirección de Dean Wright.

El largometraje se presentó en función especial en 2012 dentro del Festival Internacional de Cine en Guadalajara, con la presencia de su protagonista, Andy García. En la película también participan Rubén Blades, Catalina Sandino Moreno, Adrián Alonso y Eduardo Verástegui.