GUADALAJARA, JALISCO (22/FEB/2017).- ¿Cuáles son los inicios del rock tapatío? ¿Cuáles son las bandas pioneras que experimentaron rompiendo las normas sociales? Los tapatíos Ricardo Sotelo y José Leos —productor y director, respectivamente— se han dado a la tarea de contar la historia del género que marcó un precedente en los setenta a partir del documental “La Revo. Sing a song of love”, filme que precisamente habla sobre la agrupación pionera del estilo sonoro de aquellos años: La Revolución de Emiliano Zapata.Este proyecto cinematográfico es la ópera prima de ambos y cuenta con un apoyo económico de 200 mil pesos por parte de la Comisión de Filmaciones del Estado de Jalisco, que en su segunda convocatoria destinó una cantidad de 25 millones de pesos a 12 cintas que tengan que ver de manera directa o indirecta con el Estado. El dinero para “La Revo. Sing a song of love” aún está en proceso de ser entregado, el proyecto ya se encuentra filmado, está en proceso de postproducción; de hecho, con el dinero de la COFIEJ estarán desarrollado todas estas cuestiones técnicas que necesitan las películas: sonoridad y edición. Leos calcula que el filme costó aproximadamente un millón de pesos.Por si fuera poco José formará parte de las actividades de DocuLab que organiza el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG) que este año se realiza del 10 al 17 de marzo. De hecho, esperan que el documental puedan estrenarlo el año próximo en el FICG y así comience su recorrido por el circuito de festivales, para después buscar la opción de publicarlo en plataformas en streaming como Netflix.“La idea principal del proyecto es hacer un rescate cultural, y nosotros lo hicimos por medio del rock tapatío. En realidad esta es una idea de mi compañero Ricardo Sotelo, él es más melómano. En un bar me platicó la historia de La Revolución de Emiliano Zapata y de Javier Martín del Campo, quien tocaba en bares en los años setenta y cómo se dieron a conocer como grupo”. La idea surgió entre 2012 y 2013, quedaron seleccionados para una convocatoria del CECA y ahí comenzaron con su investigación exhaustiva para empezar a darle forma al documental. “Fuimos con Javi, lo conocimos, al principio no era muy abierto a platicarnos, porque apenas nos estaba conociendo y nosotros nos informábamos de gente que era muy melómana de ese tiempo”.Leos recuerda que además de La Revo, por aquellos años también existían otras bandas de renombre como Los Spiders, La Fachada de Piedra y 39.4. “Pero La Revo fue la que más sacó la punta, componía más en inglés y eran composiciones originales, no eran covers, y para ese tiempo era algo distinto; además, marcaba diferencia el nombre, Pancho Martínez —el primer bajista de la banda— nos dice que pegaron entre el público por el nombre porque fue identificar al pueblo con un nombre mexicano”.Una historia en cuatro actos“La Revo. Sing a song of love” se contará en cuatro actos, aunque es lineal no es estadística, es decir, la audiencia no verá un proyecto plano y sin matices, por el contrario, será emocional y vivencial, adelanta Leos. “El primer capítulo es la aventura, cómo inicia. En el segundo hablamos de la canción ‘Nasty sex’ y lo que los sacó adelante, la tercera fue cuando llegó el movimiento del Festival Avándaro, cuando satanizaron al rock y muchas bandas dejaron de tener tocadas porque nadie los contrataba. Entonces, La Revo se planteó terminar o continuar con un sonido diferente. Fue una decisión que no todos compartieron, algunos se salieron, quedaron Javi, Pancho Martínez y Toño Cruz, la primera alineación y se cambiaron a la balada”.Si usted reconoce la canción “Mi forma de sentir” de Pedro Fernández, en realidad es una composición de Javi con La Revo en esta transición de dejar el rock por la balada. “Los fans reales sí sintieron una traición y agresión, pero para La Revo era eso o no tocar, porque sólo sabían aferrarse a la música. Los únicos dos que siempre estuvieron en el grupo de los setenta a los noventa fueron Javi y Antonio Cruz. En el cuarto capítulo es cuando hablamos de los músicos, quiénes son ellos en la actualidad, después de 47 años que lleva la banda, cómo es su vida cotidiana”. El 90% del documental fue grabado en Guadalajara, el otro 10% fue grabado en la Ciudad de México, en 2015 La Revo fue invitada a participar en el Vive Latino y también en una celebración del rock de los setenta que organizó la revista Rolling Stone por lo que Leos y Sotelo estuvieron grabando durante esos días la vida de la agrupación de vuelta a los escenarios a petición de estos eventos.