La Barranca celebra en la tierra que los vio nacer

GUADALAJARA, JALISCO (20/JUN/2015).- José Manuel Bautista tenía 13 años cuando escuchó por primera vez a La Barranca en Tampico, su ciudad natal.

Se los presentó un amigo que era muy fan de Caifanes y al oírlos le fascinaron pues se sintió muy “identificado con sus letras”.

A partir de ese momento se convirtió en fan y comenzó a seguirlos por toda el país, incluso una vez llegó a verlos en Nueva York.

Por eso el rockero no podía faltar al inicio de la gira de sus 20 años denominada El Fuego de la memoria que se llevó a cabo anoche en el Teatro Diana de esta ciudad.

El joven, ya de 33 años, viajó desde Tampico y llegó a la cita en punto de las 21:10 horas, justo cuando el grupo comandado por su tocayo José Manuel Aguilera comenzó el concierto con Ser un destello, canción que lo hizo gritar con algarabía.

Tras Visión y Paraíso elemental, el líder del grupo prometió a los presentes ( jóvenes y adultos) que la noche estaría llena de mucha música, conformada con las canciones que siempre tocan y otras que pocas veces han sonado en vivo.

La promesa comenzó a cumplirse con Una nota que cae, para la cual invitó a Adolfo Romero al piano. “No inventes, esa nunca la había escuchado en concierto”, subrayó Bautista.

Con Al final de la playa, otra de las que rara vez ejecutan, el fan dijo que se acordaba de su tierra. “Me recuerda a Tampico porque vivo a 15 minutos del mar”.

Después, José Manuel Aguilera detuvo un momento la música para rememorar que en Guadalajara fue donde abrieron las alas.

“Aquí decidimos formar el grupo y que se llamara La Barranca”.

Tras temas como el danzón La fuga de Rubén, que pocas veces tocan en vivo, Aguilera dio pie a un ser acústico conformado por piezas como El mezcal, La Rosa o El gran pez.

El momento cumbre llegó con la presentación del caifán Alfonso André , uno de los primeros miembros de la banda, quien tuvo una participación especial, al igual que su esposa Cecilia Toussaint.