Kristen Stewart, una estrella polémica

GUADALAJARA, JALISCO (16/JUL/2010).- ¿Lo tiene todo? A primera vista parece que, en efecto, Kristen Stewart posee todos los elementos para ser feliz: protagoniza la franquicia cinematográfica más exitosa de la actualidad; a sus 19 años es una de las mujeres más ricas e influyentes de la Meca del Cine; ha recorrido varias de las ciudades más glamourosas del mundo en “plan de fiesta” y es una de las mujeres más codiciadas por varios de los galanes del momento.

Pero algo falla en el “círculo de la felicidad” de Stewart. La nacida en California se reconoce como una chica melancólica a la que tanta fama lejos de hacerla feliz la hace sentirse asediada. Algunas de sus declaraciones incluso dan a entender que está “harta” de ser quien llama la atención en la alfombra roja y no puede esperar para que llegue el momento en que esa avalancha llamada Crepúsculo termine.

Lejos de la normalidad

Antes de ser conocida como Bella Swan por miles de fanáticos, Kristen tuvo una infancia relativamente común, aunque estuvo en contacto desde que nació con el mundo de la actuación, pues su padre, John Stewart, era director de televisión en la cadena FOX y su madre, la australiana Jules Mann era guionista.

Estudió hasta la secundaria en una escuela (experiencia que afirma detestaba). Después dejó las aulas antes de los 15 años, aunque siguió tomando clases a través de correspondencia (un sistema de uso común en Estados Unidos) debido a su decisión de dedicarse a la actuación.

Su primer papel destacado le llegó a los 12 años y lo obtuvo en La habitación del pánico (2002), película de suspenso donde compartió créditos con Jodie Foster y se llevó de paso buenas críticas. No faltó quien señaló a la todavía niña como uno de los talentos a seguir en el futuro.

Y tenían razón. El aspecto frágil pero a la vez determinado cautivó a los productores de Crepúsculo, que la eligieron para ser Bella Swan, la dama en apuros en la saga que estaba a punto de dar el salto al cine desde los libros.
Al darle el sí al proyecto de vampiros adolescentes, Stewart cambió la ruta de su vida, misma que se ha vuelto turbulenta en los últimos meses.

Lluvia de rumores

Para la joven actriz es imposible navegar en internet o abrir un periódico sin encontrarse alguna nota hablando sobre ella. Desafortunadamente, la mayor parte de las veces aparece en medio de bizarros rumores. Ella ha declarado que no tolera a los periodistas. Incluso llegó a comparar la experiencia de desfilar en una alfombra roja con ser “violada”.

El término no cayó bien en varios sectores, que tacharon a Stewart de insensible y exagerada. La estrella se tuvo que disculpar públicamente de sus palabras, aunque es evidente en cada aparición pública el cansancio en su rostro y la poca disposición por atender a los fotógrafos, algo que contrasta con sus coprotagonistas en Crepúsculo, Taylor Lautner (Jacob) y Robert Pattinson (Edward), quienes generalmente aparecen sonrientes y despreocupados.

Justamente con Pattinson es con quien Stewart ha tenido más problemas. Y no es que se lleven mal, sino por la insistencia de sus fanáticos y un sector de la llamada “prensa rosa” en ligarlos sentimentalmente. Ambos son pareja en la pantalla grande y los rumores que les han endilgado tras las cámaras van desde que salen a cenar juntos, que ella lo acosa en los foros de rodaje, que se pelearon y no se dirigen la palabra y el más reciente es que ya se casaron en una ceremonia secreta y ya viven juntos. La cantidad de chismes sobre su persona no ayudan a que Kristen sea más abierta con la prensa y además sigue marcando distancia con sus fanáticos.

Sus declaraciones...

Sobre la alfombra roja

''No me encuentro muy a gusto en la alfombra roja. Miro y hay miles de personas, y me doy cuenta de que podrían atacarme y asesinarme''

Sobre sus fanáticos

''Ninguna seguridad podría protegerme. Evidentemente son fans, pero pienso en ellos lanzándose sobre mí''

Sobre Crepúsculo

''Claro que sé que la saga de Crepúsculo es un fenómeno. Pero sé que pasará y volveré a hacer lo que me gusta: Pequeñas producciones que nadie ve''