Julión Álvarez desata el baile por casi tres horas

ZAPOPAN, JALISCO (18/OCT/2011).- Seis mil jóvenes amantes del género grupero fueron los que ocuparon hasta los pasillos del Palenque la noche del domingo para bailar los éxitos de Julión Álvarez y su Norteño Banda.

Desde que la agrupación comenzó a tocar, los asistentes, en su mayoría jóvenes, ya abarrotaban el lugar desde la zona preferencial hasta lo más alto de las gradas, y tras una larga espera Julión se presentó en el ruedo alfombrado a las 00:40 horas de la madrugada del lunes.

El furor se desató al instante y a una sola voz el tumulto se unió a Olvídame, la carta inicial del repertorio que incluyó más de 30 temas.

Ante la respuesta, el oaxaqueño no vio necesidad de cantar, así que decidió prescindir del micrófono para que fuera el público quien interpretara la canción.

Desde ese momento y hasta el último, los jóvenes se pusieron de pie y no dejaron de bailar, y el ánimo no decayó en las casi tres horas de concierto. Y tú, Ni lo intentes, María y Terrenal fueron algunas de la piezas más celebradas.

Se pone ranchero

El intérprete entró luciendo un pantalón de cuero, camisa, saco y sombrero negros, pero después de dos horas salió y dejó a su banda a cargo para luego sorprender con un traje y sombrero charros, lo que desencadenó una ola de ovaciones.

En ese instante su Norteño Banda cedió el ruedo al mariachi que lo acompañaba, y dieron entrada a una sección ranchera original de Vicente Fernández: El rey, Ella y Acá entre nos.

La sorpresa no terminó allí, el nuevo exponente de la música de banda  salió una vez más y regresó con su atuendo inicial, pero esta vez con baladas, y regresó a sus andadas con La perisca, Fuego a la escondida y Me enamoré y perdí, donde se supone que terminaría el baile.

Poca interacción, mucho baile

A lo largo de la noche Julión aceptó algunos tragos de tequila directos de la botella, pero a diferencia de otros artistas se acercó poco a la gente y fueron contadas las personas con quienes se fotografió mientras cantaba, aunque recibió en el ruedo a dos mujeres, quienes mostraron su mejores pasos de baile.

Pasadas las tres de la mañana la gente seguía bailando y Julión complaciendo, al grado que le dio una segunda vuelta a ciertas canciones del repertorio y entonó otras clásicas del género como Ya te olvidé.

Sin ganas de irse, Julión se despidió una y otra vez, pero en el público el entusiasmo seguía como al inicio, finalmente, se marchó después de una gran reverencia y agradeció a su público, que agotó las entradas para esa noche a sólo seis horas de haber salido a la venta, no obstante el oaxaqueño regresará al Palenque el próximo 27 de octubre, y se espera su presencia el 7 de noviembre en el Foro Principal de las Fiestas de Octubre.