Joaquín Cosío apunta sus puños al cine

CIUDAD DE MÉXICO.- Durante distintas etapas de su vida, Joaquín Cosío ha entrenado boxeo. Le gusta. Lo relaja. Así que cuando se le invitó a protagonizar el filme Mar muerto, de Ignacio Ortiz (Cuento de hadas para dormir cocodrilo), ese fue un buen punto para aceptar el proyecto.

Joaquín tiene 45 años. En el filme interpreta a un ex campeón mundial que se aleja de los cuadriláteros luego de matar accidentalmente a su oponente. “El boxeo me gusta, es una disciplina que he entrenado en diferentes etapas de mi vida. Es un deporte en el que rápidamente adquieres condición, un tono y a mí en lo particular me resulta relajante”.

Agrega con un semblante tranquilo que “tuve que entrenar, digamos, los movimientos básicos. Las escenas que filmamos están de alguna manera coreografiadas, espero que funcionen, pero sí implicó cerca de dos semanas entrenar con el ‘Cucú’ Hernández, un joven boxeador”.

En la cinta que próximamente partirá a Oaxaca para continuar el rodaje, Joaquín es hijo del personaje que interpreta Mario Almada, otra leyenda del cine mexicano. La cinta es una adaptación libre del clásico El hijo pródigo.

Un recuento de éxitos

Hace ocho años, Joaquín irrumpió en el cine como el popular luchador Mascarita en Matando Cabos. Todavía en la calle varios le gritan por ese nombre, algunos le invitan una comida o los microbuseros no le cobran el pasaje. Vaya respeto que ha logrado el nayarita, si se toma en cuenta que su carrera actoral profesional la inició a los treinta y ocho años.

“No puedo más que sentirme contento. Una de las aspiraciones que tenía era trabajar con Nacho (Ortiz, el director de Mar...). Hice mis casting para estar en Cuento de hadas.., en Mezcal, hasta que lo logré y llegué a ésta”.

En Ciudad Juárez estudió Comunicación, fue maestro, trabajó en un periódico como diseñador gráfico y actuó en obras. Ahora se pone los guantes, pues la campana suena y comienza un nuevo round.

La frase:

“El boxeo me gusta, es una disciplina que he entrenado en diferentes etapas de mi vida. Es un deporte en el que rápidamente adquieres condición, un tono y a mí en lo particular me resulta relajante”.
Joaquín Cosío, actor