Jaguares se adentra en Estados Unidos

NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- La banda mexicana de rock Jaguares sigue adelante estos días con la presentación en Estados Unidos de los sonidos que integran 45, su disco más reciente, en el que quieren alertar al público sobre los problemas que sufre la sociedad.

Mientras 45 sigue en los primeros lugares de las listas de ventas en México y Estados Unidos, Jaguares descubre poco a poco a la audiencia estadounidense, con una gira en la que denuncian temas tan importantes como la violencia contra las mujeres o la pobreza en la que viven millones de personas en el Sur del Continente.

“Queremos que la gente se acerque a nuestros conciertos, no sólo por nuestra música, sino para que se empapen de lo que pueden hacer por su comunidad y su entorno social”, aseguró el vocalista de la banda, Saúl Hernández, quien se mostró “emocionado” por el éxito que cosechan sus presentaciones en Estados Unidos.

Esta gira, con la que ya han estado en Houston, Nueva York o Miami, forma parte de la iniciativa de Amnistía Internacional Small Places Tour, con la que la organización celebra los 60 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprovechando los conciertos de varias bandas alrededor del mundo.

Henández explicó que “a los Jaguares nos gusta este proyecto. En nuestras actuaciones alertamos de problemas como los que sufren miles de personas en Darfur, los asesinatos de mujeres que siguen sucediendo en Ciudad Juárez o las torturas que hay en muchos de nuestros países”.

Pobreza que duele
Para el vocalista de Jaguares, que eligió el título de su nuevo disco para dar voz a los 45 millones de pobres que viven a día de hoy en México, “la movilización civil es mucho más poderosa que cualquier partido político”.

“Es muy triste que, en un país que da una imagen de democracia, no haya nada de democracia: se trata de una oligarquía muy clara que genera grandes diferencias en la sociedad”, consideró el músico, para quien es “inaceptable” que en su país vivan 45 millones de personas en situación de pobreza.

Hernández, por otro lado, mostró su entusiasmo por los conciertos que la banda realiza en Estados Unidos, ya que, según dice, se trata de un país que reúne a “una audiencia heterogénea que crea un ambiente mágico” en los conciertos. “Es muy agradable estar tocando en un lugar en el que hay colombianos, españoles, puertorriqueños y, obviamente, mexicanos. Se crea una energía orgánica muy poderosa y diferente”.