Hopkins confiesa que estuvo a punto de rechazar su papel del padre ‘Lucas’

CIUDAD DE MÉXICO (16/FEB/2011).- Anthony Hopkins comentó que estuvo a punto de rechazar su papel del padre "Lucas", un exorcista en la película "El rito", dirigida por Mikael Håfström, porque no deseaba interpretar de nuevo a un loco como "Hannibal Lecter".  

"Cuando leí el guión ni siquiera lo terminé, no me despertó nada en una primera lectura; me empecé a dar cuenta que estaba la posibilidad de hacer nuevamente a un loco; sin embargo, me llamó mi agente y me convenció", indicó.  

"Es un director inteligente, que sabe su trabajo, porque también he trabajado con cineastas idiotas que no saben dónde colocar la cámara. El no es un presuntuoso ni tampoco egoísta", señaló.  

El actor británico se encuentra en México, junto con Alice Braga y Colin O'Donoghue, para promocionar la película que se estrenará el próximo 18 de febrero en 550 salas de la República Mexicana.  

De muy buen humor y pidiendo únicamente unos minutos para checar su celular, Hopkins se presentó con los representantes de los medios nacionales e internacionales para hablar sobre su visita, y saludando casi en un perfecto español.  

El primero de los cuestionamientos que se hicieron fue por qué accedió venir a México a promocionar 'El rito" y, en una aparente brusquedad, respondió: "Porque me lo pidieron", para luego soltar una carcajada, sobre todo, por la cara de sorpresa de sus interlocutores.  

Agregó: "Me gusta México, es la quinta ocasión que vengo. Me fascina su comida, el país, su cultura y las personas, que son sumamente agradables. No les voy a dar una respuesta seria, me gusta tomar la vida alegre y divertida".  

Hopkins insistió en que actualmente todo mundo se toma la vida muy en serio y él ya dejó de hacer eso, porque ha comprendido que hay que disfrutarla en todo momento.  

En este largometraje, Hopkins interpreta a "Lucas Trevant", un sacerdote que realiza exorcismos de una manera nada ortodoxa y que le ha ganado cierta fama. El será el guía espiritual de "Michael Kovak" (Colin O'Donoghue), y le enseñará los secretos de esa actividad.  

Respecto a la importancia de este papel en su carrera, el actor señaló: "Nada es importante. Simplemente soy un actor al que el gusta su trabajo y para no andar en las calles perdiendo el tiempo".  

Agregó que si se trata de un buen guión y una buena historia, entonces la acepta, "lo que pasa es que no me gusta ponerme serio o formal en ese sentido, pues conforme voy envejeciendo tomo la vida más a la ligera.  

Y les digo esto porque hay quienes se enojan cuando respondo de esta forma, pero no hay que molestarse".  

Hopkins comentó que hay quienes le insisten que ante todo es un gran actor; 'quizás estoy equivocado y mañana me voy a tener que comportar más seriamente".  

Subrayó que la palabra "importante" es muy densa para él, que sólo se toma la vida de otro modo y estar en la película lo disfrutó enormemente, como hace tiempo no lo hacía.  

"Ahora todo lo veo con mucha nostalgia, pues estuvimos en Budapest y Roma con Alice Braga y Colin O'Donoghue; pero esto puede ser una actividad simple y normal, es un trabajo.  

"He trabajado con personas que son muy, pero muy apasionadas, pero yo no soy así, prefiero irme a mi casa. No soy tan apasionado para eso, un día me voy a morir y mejor disfruto el momento actual", añadió.  

Reveló que es un apasionado de la buena comida, los buenos vinos, las mejores lecturas y disfrutar la vida, así como la música; y anunció que en breve ofrecerá un concierto en Brigham, Inglaterra.