Historias del más allá con Frankenweenie

GUADALAJARA, JALISCO (10/OCT/2012).- Nueva Holanda. Un pueblito sencillo, de casas de madera, jardines grandes y vida que transcurre muy lento, perdido en el interior de Estados Unidos. Un lugar como cualquier otro, donde está a punto de suceder algo único, algo que podría cambiar la forma en que entendemos el concepto de la vida y la muerte: la resurrección de un perro a través de un experimento científico… realizado por un niño.

Frankenweenie, película en blanco y negro dirigida por Tim Burton bajo la técnica animada de stop motion y distribuida por la Casa Disney, es un extraño mix donde la ciencia ficción, la aventura, el horror y el amor se dan la mano a través de los ojos del protagonista: Víctor Frankenstein.

Víctor es un niño con alma creativa, pero que tiende a ser solitario. Es aficionado a rodar películas caseras de monstruos, que solamente le muestra a sus padres, pues sabe que su curioso pasatiempo no es algo que compartan sus compañeros de clase. Su única compañía es la de Sparky, un inquieto y valiente cachorro que gusta juguetear a los pies de su amo.

La vida de Víctor transcurre con relativa tranquilidad, hasta que un terrible accidente le arrebata a Sparky. Mientras que sus padres tratan de hacerle entender el inevitable ciclo de la vida y la muerte, el joven Frankenstein comienza a crear un plan para traer a su perro de vuelta a la vida, a través de un “electrizante experimento”. Y a partir de aquí, la trama de la película comienza a viajar por senderos inesperados, giros en el argumento e incluso comedia involuntaria. Todo con el sello Burton.

La chispa del amor

Frankenweenie se estrena este viernes en las salas de cine mexicanas. Pero la trama tiene 28 años dando vueltas en la mente de Tim Burton.

En 1984, Burton presentó a Disney la versión en cortometraje de Frankenweenie, rodada con poco presupuesto y actores reales. Cuando los ejecutivos de la compañía la vieron en aquellos años quedaron horrorizados, por decir lo menos. Les parecía que el joven cineasta les había tomado el pelo, se había gastado el dinero de la compañía de forma irresponsable, que la cinta era demasiado oscura y tétrica para los niños y la enlataron.

Para Burton ese fue uno de los momentos más duros en su carrera. Un revés del que se supo levantar. Y ahora, constituido como uno de los realizadores más prestigiados de la Meca del Cine, retoma aquel cortometraje para presentarlo al mundo tal y como la imaginó. Ya no como corto, sino como largometraje. Ya no con actores reales, sino con personajes animados en stop motion.

“Frankenweenie es, debajo de toda su acción, aventura y experimentos, una historia de amor”, afirma el director en entrevista. Pero ojo, porque “amor” es una palabra que toma un significado muy peculiar cuando es pronunciada en labios de Tim Burton. “La gente no se imagina que yo pueda hacer películas de amor, pero de hecho, ésta lo es: muestra la relación que desarrollan un perro y su niño, de cariño y compañía mutua. Y yo la entiendo porque la viví siendo pequeño”.

Al director no le agrada la idea de hablar del largometraje usando el término refrito. “No lo es”, afirma, y agrega que “mucha gente piensa que es el remake del corto que hice en los años ochenta, y para mí, por todos los elementos que se le sumaron, ya es algo completamente distinto. Es un universo expandido, donde se agregan cosas como los otros monstruos, los otros niños y los maestros, que estaban ausentes en la versión original”.

Aunque la trama se inspira esencialmente en el relato de Frankenstein original de Mary Shelley, buena parte de los elementos encuentran su reflejo en la vida de Tim. “Hay muchas cosas de mí que están en la trama. La forma en que interactúan los niños en la escuela, el sentirse como el raro de la clase, el ver a los profesores como figuras graciosas y amenazantes a la vez. Todos esos elementos estaban en mis recuerdos, latentes para ser usados algún día. Y el día llegó”.

Ni tan infantil
Con ojos maduros

Pertenecer a la Casa Disney no significa que Frankenweenie sea una “película infantil”. El propio Tim Burton advierte que muchas películas de la empresa se salen de esa calificación de inocencia.

“La gente olvida que las películas de Disney siempre tuvieron, y siguen teniendo, un factor de tragedias enorme. La mamá de Bambi muere en la película. En El rey león fallece Mufasa, la muerte está siempre presente desde el inicio de las películas”.

El realizador expone en declaraciones exclusivas para este medio que “Walt Disney supo introducir en todas sus películas muchos elementos siniestros y oscuros que de repente preferimos olvidar, pero están allí”.

Burton agrega que pese a ser en blanco y negro y tratar temas como la muerte y la resurrección, “Frankenweenie sigue los patrones clásicos de Disney. Con muchos elementos de terror, o excéntricos, pero la historia es simple y emocional”.

Víctor Frankenstein: El dueño de Sparky, hará lo que sea para volver a la vida a su mascota, sin medir las consecuencias de sus actos. Su nobleza e inocencia puede jugarle en contra en más de una ocasión.

Sparky: Extremadamente juguetón y curioso, el cachorro de la familia es el mejor amigo de su dueño y, la vez, un fiel guardián de los Frankenstein.

Sr. y la Sra. Frankenstein: Los papás de Víctor. Tratan de animar a su hijo para que no limite su entretenimiento a permanecer en el ático de la casa, rodando películas.

Elsa Van Helsing: La chica que vive al lado de la casa de la familia Frankenstein. Parece ser la única que comprende bien a Víctor.

Mr. Rzykruski: El extraño maestro de Víctor. Es un hombre de ciencia que no soporta la holgazanería. Sus enseñanzas quedarán grabadas en la mente del protagonista.

Edgar: El extraño maestro de Víctor. Es un hombre de ciencia que no soporta la holgazanería. Sus enseñanzas quedarán grabadas en la mente del protagonista.

Frankenweenie / Estreno en cines: 12 de octubre