Guadalajara aplaude el ambiente folclórico

GUADALAJARA, JALISCO (28/AGO/2011).- Una ciudad que respira mariachi y sentimiento campirano como Guadalajara le debe mucho a uno de los grandes “arquitectos”  del género tradicional: Don Manuel Esperón, una de las figuras más importantes de la música latinoamericana y particularmente de México.

Y más en estos días, donde se celebra el Encuentro Internacional del Mariachi y la Charrería, que en su edición número 18 ha desplegado diversas actividades dentro de la ciudad y también en diversos municipios del Estado.

Ayer por la mañana se tomó la foto oficial del encuentro, que reunió a mariachis de diversas procedencias y raíces, aunque todos tienen en común el amor por la música vernácula, misma que este fin de semana recordó a uno de sus autores más brillantes: Manuel Esperón.

Esperón, quien falleció el pasado 13 de febrero en Cuernavaca, Morelos, es considerado uno de los máximos compositores de la llamada Época de Oro del cine mexicano.

En honor a su amplio trabajo, el X Encuentro de Mariachi Tradicional le rindió un homenaje el viernes por la noche en el patio central del Palacio Municipal de Guadalajara, donde estuvo presente la viuda del compositor Beatriz García, quien agradeció al público reunido la calidez con la que se recuerda el legado del escritor musical. Además, se le entregó un reconocimiento posmortem al artista.

Durante el espectáculo ofrecido en el Centro tapatío, autoridades señalaron que “esta noche se le rinde homenaje a una de las grandes glorias de la música nacional, quien recientemente ha partido pero dejó un amplio legado musical, con el que nos seguiremos identificando como mexicanos ante el mundo: El maestro Manuel Esperón”.

Un éxito tras otro

A la ceremonia asistieron Ignacio Bonilla Arroyo, director de culturas populares de la Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado de Jalisco; Myriam Vachez Plagnol, secretaria de cultura del Ayuntamiento de Guadalajara, así como Diana Negrete, hija de Jorge Negrete. La presencia de esta última se debió a que quien se encargó de interpretar los temas de Esperón a lo largo de la velada fue Lorenzo Negrete, nieto del Charro cantor. En la velada también tomó parte la cantante Adriana Martínez.

Poseedor de uno de los catálogos de temas de mayor importancia en la historia del país, el legado de Manuel Esperón sigue causando un profundo eco en la cultura popular mexicana.

Lorenzo Negrete señaló que el compositor fue capaz de sintetizas los sentimientos más hermosos en sus canciones, además de sobresalir en una momento de grandes leyendas como la Época de Oro del cine nacional.

El maestro Esperón dejó para la posteridad temas como La mujer del puerto, Arandas, Noche plateada, A la orilla del mar, No volveré, Un tequila con limón, Amorcito corazón, Mi cariñito, Flor de azalea, Maldita sea mi suerte, Yo soy mexicano, El apagón, ¡Ay Jalisco, no te rajes!, Serenata Tapatia, Cocula y Traigo un Amor, algunas de las cuales fueron interpretadas en la velada.

Además, se presentaron dos cuadros musicales para ballet: Fiesta mexicana y Arre caballito, que en su momento fueron aprobados por el propio Manuel Esperón.