Funk travieso en el Cavaret

GUADALAJARA, JALISCO (10/AGO/2013).- Noche de candela rubor y de meneos de cadera. Pura sabrosura y baile. O en otras palabras, una fiesta al más puro estilo de las que se arma Illlya Kuryaki & The Valderramas. Todo esto se vivió la noche del viernes en el Teatro Estudio Cavaret, donde se presentó el dúo argentino ante sus fieles.
 
Clásicos del hip hop y el funk argentino, los Kuryaki, concepto compuesto Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur, venían cargados con los éxitos provenientes de discos clásicos como Chaco (1995), Versus (1997) y Leche (2000). Pero no todo en ellos es pasado. Y es que le dieron espacio, y bastante, a su producción más reciente, Chance, con la que volvieron al ruedo sonoro tras casi una década de silencio.
 
"Guadalajara, como están esta noche", saludó Spinetta tras arrancar el concierto con Chavo, ante un ensordecedor griterío que inundó el Cavaret, y que por momentos ayudó a ocultar la pésima acústica que tradicionalmente caracteriza al recinto.
 
Ula-Ula, Jaguar House y Jugo fueron las elegidas para abrir el concierto y convertir el piso del recinto de Parres Arias en una pista masiva de baile. La actitud desenfadada del par se transmitió como agua desde el escenario hasta el público, que no les regateó aplausos y besos a los dos pamperos.
 
El show conectó las canciones básicas en la carrera de Ilya Kuryaki. Durante las casi dos horas de concierto el espíritu noventero se sintió con intensidad en el Cavaret, con temas como Chica Chicle, Celebración, Adelante y Safari. Caderas, brazos, cinturas y piernas se movieron con el intenso y furioso meneo que ordenaban las ondas sonoras emanadas del escenario. Sonrisas de complicidad, alegría, satisfacción y uno que otro romance en ciernes completaron el cuadro de una noche memorable.
 
El climax del concierto llegaría con aquellos temas que convirtieron al dúo en clásicos de la música latina: Coolo, Jennifer del Estero y Abarajame. Para Kuryaki, la velada terminaba, pero para los asistentes fue el arranque perfecto del fin de semana.

El dato
 
Para papá
 
Uno de los momentos emotivos del concierto fue cuando los Illya Kuryaki interpretó el tema Águila Amarilla, canción dedicada al padre de Dante, el legendario músico argentino Luis Alberto "El Flaco" Spinetta.
 
Durante la interpretación de la pieza, aparecieron en las pantallas montadas en el Cavaret imágenes del Flaco, a quién el dúo homenajea con un tema donde se hace referencia a la obra poética de Luis Alberto, quien destacó por su labor como guitarrista y compositor de rock argentino.
 
EL INFORMADOR / FRANCISCO GONZÁLEZ