Es la hora de Ximena Sariñana

CIUDAD DE MÉXICO (06/AGO/2011).- Ni la controversia que se generó por formar parte del cartel, ni el nerviosismo que pudo haber sentido la cantante Ximena Sariñana impedirán que sea (a la par de la tijuanense Ceci Bastida) representante de México en el famoso festival Lollapalooza, cuya sede será Grant Park, en Chicago, este fin de semana, y se transmitirá en YouTube, como “Una semana de Lollapalooza”.

A finales de abril pasado, tras darse conocer que la cantautora mexicana estaría en el festival que celebra 20 años, se armó una polémica en nuestro país, ya que mientras unos aplaudían, otros condenaban su participación.

La hija del cineasta Fernando Sariñana declaró sentirse bien con su intervención en el encuentro musical y de cierto modo preparada porque ya ha dado shows al público estadounidense; sin embargo, también manifestó una lluvia de emociones al respecto.

“Me siento entre fascinada, nerviosa, orgullosa, agradecida, todo. Es muy padre poder ver mi nombre en el cartel oficial. Es fantástico”, comentó la artista.

“Lollapalooza es un festival tradicional y con tanto cartel que tiene, es genial que me hayan invitado. Mucha gente tuvo que ver, obviamente, mi management, la gente de la disquera, de la agencia, de todos lados, cada quien puso su granito de arena y vamos para allá”. Ahora sólo resta esperar la reacción del público, que podrá escucharla en español… o ¿en inglés?

Tropieza, pero no cae
La inclusión de Ximena Sariñana no fue la única que hizo ruido, pues el público también se mostró inconforme ante las bandas que presentan como estelares: Eminem, Foo Fighters, Coldplay y Muse, esto debido a que el festival nació como una plataforma para la música alternativa y evidentemente, éstas son parte de dicho mercado.

Pero esto no ha sido el mayor problema que ha enfrentado el encuentro, en comparación con otras ediciones accidentadas , como en 1994 cuando confirmaron como el espectáculo principal a la banda más representativa del grunge, Nirvana, grupo que canceló su participación el 7 de abril, tras la muerte de Kurt Cobain, quedando el grupo Smashing Pumpkins en su lugar.

En la segunda mitad de la década de los años noventa, Perry Farrel, creador del festival y ex líder de Jane’s Addiction, descuidó la organización por atender un nuevo proyecto, lo que ocasionó que en 1998 Lollapalooza “cayera en coma” los siguientes cinco años.

El despertar del festival en 2003 no puede decirse que haya sido un gran regreso, ya que muchos fanáticos del evento no pudieron costear los boletos, y al año siguiente las ventas fueron tan bajas que tuvo que cancelarse; pero en 2005 recobró su fuerza con un cartel más amplio, con más escenarios y sólo dos personas hospitalizadas por el intenso calor.

En este 2011, Lollapalooza ha cambiado, ha salido de Estados Unidos después de 20 años e inició su paso por Chile con mucho éxito, logrando reunir a más de 100 mil personas, por lo que comenzaron los preparativos de la edición 2012, teniendo de nuevo a este país como sede y sumar a otro sudamericano: Brasil.