Sábado, 23 de Noviembre 2024
Entretenimiento | Una fiesta con marcado sabor británico pone el broche a los premios

Emeli Sandé se corona en los Brit Awards

La cantante obtiene el premio a mejor solista femenina y mejor álbum

Por: EFE

La cantante escocesa Emeli Sandé se consagró como la artista más importante de esta entrega. EFE /

La cantante escocesa Emeli Sandé se consagró como la artista más importante de esta entrega. EFE /

LONDRES, INGLATERRA (20/FEB/2013).- El gran día de la música en el Reino Unido tocó a su fin con una gran fiesta de marcado sabor británico en pleno centro de Londres en la que se dieron cita numerosos rostros del mundo del espectáculo tras la gala de los Brit Awards.

Tras la ceremonia, celebrada en el O2 Arena y en la que la cantante escocesa Emeli Sandé se consagró como la artista más importante del país al ganar el premio a mejor solista femenina y mejor álbum, los invitados se trasladaron a una enorme sala de fiestas en pleno corazón financiero.

A partir de las 10:15 GMT, al terminar la intensa gala y en medio de un fuerte y frío viento, los taxis se acumularon en las calles de la City londinense para dejar a un conglomerado de artistas, periodistas y amigos al calor del amplio local.

En el interior, esperaban suculentos canapés calientes y fríos o sandwiches, aunque los asistentes también pudieron degustar platos tradicionales británicos, como pasteles de carne o "pudding" de verdura y queso.

Los primeros protagonistas de la noche que hicieron su entrada en una sala abarrotada fueron los ganadores del premio al mejor grupo británico, Mumford & Sons, que previamente habían deleitado al 02 Arena con una vibrante actuación en directo.

Marcus Mumford y sus compañeros se movieron entre el área para fumadores y la zona VIP, en la que los vacíos sillones "reservados" contrastaban con los atestados pasillos por los que circulaban caras conocidas del panorama musical británico, como Jamie Cullum.

El prestigioso compositor no se quedó mucho tiempo en la zona reservada y prefirió integrarse con el resto de asistentes, más propensos a la charla que al baile pese a que el DJ pinchó temas de todos los estilos, desde Bob Marley hasta Foo Fighters.

Conforme avanzaba la noche, algunas de las caras más aplaudidas durante la ceremonia de entrega de premios se dejaron caer por la fiesta, que contaba incluso con un espacio dotado con cosméticos que las invitadas podían usar para retocarse.

Cerca de la medianoche, apareció el presentador de los Brits, James Corden, acompañado de su pareja, con la que se adentró en la ya masificada zona VIP, donde a los famosos se les entretuvo incluso con sofisticados juegos de cartas.

La estrella que más se hizo esperar fue la cantante estadounidense Taylor Swift, que había presentado uno de los premios durante la gala además de interpretar uno de los temas de su último álbum con una espectacular puesta en escena.

La joven vocalista cambió por tercera vez su vestuario y dejó a un lado los tacones en favor de las manoletinas para disfrutar de una velada que prometía alargarse hasta bien entrada la madrugada.

La fiesta no solo reunió al mundo de la música, sino que también sirvió de cónclave para numerosos rostros de la televisión británica y el periodismo.

Sandé, diva del soul británico
La actual sensación del soul británico, Emeli Sandé, acaparó hoy el protagonismo en la flamante gala de los premios Brit de la música al llevarse dos galardones, entre ellos el más codiciado a "mejor álbum" por "Our Version Of Events".

Con una voz prodigiosa y un trabajo debut que vendió la friolera de 1,6 millones de copias en el Reino Unido en 2012, la escocesa Sandé centró las miradas de una ceremonia celebrada en el gigantesco 02 londinense, en la que brillaron también Ben Howard y Adele.

Peinada con su característico y llamativo tupé platino, la magnética cantante de Soul y R&B fue la primera galardonada de una noche que arrancó, por todo lo alto, el grupo Muse con la interpretación del tema "Supremacy", acompañado de 60 músicos y un despliegue de juegos pirotécnicos.

Con su Brit a "mejor cantante femenina", Sandé dejaba fuera a Bat for Lashes, Jessie Ware, Paloma Faith y a la malograda Amy Winehouse, nominada a título póstumo 18 meses después de su prematura y trágica muerte.

La también pianista, que no hace tanto escribía temas para otras estrellas como Susan Boyle o Cheryl Cole, y que empezó a hacerse un nombre gracias a su incursión en el tema "Diamond Rings" del rapero Chipmunk, fue la merecedora del "caramelo" de la gala: el Brit a "mejor álbum" por "Our Version Of Events".

Al subir al escenario por segunda vez, una emocionada Sandé, cuya voz ya cautivó en las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos Olímpicos de Londres, explicó que escribió ese disco, el más vendido en el Reino Unido en 2012, "porque entonces no tenía la seguridad suficiente para poder decir todas esas cosas en persona".

Sandé compartió protagonismo con Ben Howard, un cantautor inglés que abandonó sus estudios de periodismo para volcarse en su carrera musical y que esta noche se alzó, de forma inesperada, con dos estatuillas, diseñadas, este año, por el controvertido artista Damien Hirst.

Howard recibió primero el Brit a "artista revelación", por encima de otros candidatos más conocidos como Alt J, Jake Bugg, Jessie Ware o la gran favorita de las apuestas, Rita Ora, y ganó, también, el premio a "mejor artista masculino", donde se impuso a Calvin Harris, Olly Murs, Richard Hawley y Plan B.

El músico, a quien la crítica ha comparado con Nick Drake, mostró el más absoluto asombro al recoger sus trofeos, sin dejar de repetir "lo extraño" que le resultaba la situación, además de excusarse por "lo mal" que se le da "hablar en público".

Otro de los Brit más golosos, el de "mejor grupo británico", fue a parar a la exitosa formación de rock y folk "Mumford and Sons", que el pasado fin de semana triunfaba ya en los Grammy con el premio a mejor álbum por "Babel".

También ahora estos artistas confesaron su "sorpresa y orgullo", sobre todo por haberse impuesto a nominados de la talla de "Muse", "One Direction", "The XX" y "Alt J".

Y entre premio y chascarrillo del presentador, el popular cómico James Corden, el escenario iba cambiando de colores y sonidos con actuaciones de excepción.

Por allí pasaron el venerado ex de Take That Robbie Williams, de azul eléctrico y con un fondo geométrico, un repeinado Justin Timberlake, que se recorrió cada recoveco del escenario, "One Direction" -ganadores del Brit al "éxito global"-, la guapa Taylor Swift, y los también premiados Ben Howard, Emeli Sandé y "Mumford and Sons".

En otras categorías, el veterano grupo liderado por Chris Martin, Coldplay, se impuso a los veteranos Rolling Stones al ganar el Brit al "mejor directo", mientras que la imponente Adele fue la flamante vencedora del premio a "mejor sencillo" por su tema "Skyfall", compuesto para la última película de la saga de James Bond.

Quien fuera la clarísima triunfadora en la pasada edición de los Brit agradeció hoy su galardón mediante un vídeo grabado desde Los Ángeles en el que aludió, bromeando, al comentado incidente ocurrido el pasado año, cuando el mismo presentador le interrumpió en la mitad de su discurso de agradecimiento, provocando un gesto de cabreo de la artista.

El Brit a "mejor artista femenina internacional" recayó en Lana del Rey, Frank Ocean fue escogido "mejor artista masculino internacional", el Brit a "mejor grupo internacional" se lo llevaron los "Black Keys", grandes triunfadores de los Grammy, y el premio de la crítica fue a parar a manos de Tom Odell.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones