El rugido de Los Tigres del Norte retumba en Fiestas de Octubre

ZAPOPAN, JALISCO (11/OCT/2010).- No hay Fiestas de Octubre sin Los Tigres del Norte. Seguramente, año con año el Patronato que organiza la feria popular de Guadalajara, al levantar el inventario de los atractivos juegos mecánicos, antojitos mexicanos y espectáculos artísticos, debe haber sido incluidos “Los ídolos del pueblo”, que extrañamente no llenaron el Auditorio Benito Juárez.

El público logró ocupar cerca de 90% de los lugares disponibles de la cuarta fecha de conciertos que se presentan en el auditorio, aunque las filas para ingresar en la entrada principal seguían en aumento, una vez comenzado el rugido musical norteño.

Adentro, Los Tigres del Norte comenzaban a rasgar el tiempo con “zarpazos” musicales, como La granja, que abrió la presentación de los sinaloenses, y fueron recibidos por una multitud que ya los extrañaba luego de apenas dos meses de su más reciente presentación que tuvieron en el Auditorio Telmex.

Ataviados en traje rojo, con adornos en azul, blanco, amarillo y verde, y sus respectivos bordados en hilo brillante, Jorge, Luis, Eduardo, Hernán y Óscar, cada uno detrás o colgando su instrumento, pasaban lista de presentes con cada tema interpretado.

La cuestión olvidada, Le compré la muerte a mi hijo, Libro de recuerdos y La tumba falsa desfilaban por las bocinas, mientras más de 15 mil personas y “Los Jefes de Jefes” coreaban en una sola voz cada tema. A estas alturas del partido, ¿quién no se sabe una de Los Tigres?
Algunos, como Gabriel y Juan Pablo, vecinos de la colonia Auditorio Benito Juárez, se encontraban formados en la fila para subirse al Spider, nuevo juego mecánico de las Fiestas de Octubre que ha sido unos de los principales atractivos para los jóvenes en la presente edición, sin embargo al escuchar los primeros acordes de La banda del carro rojo vendieron sus boletos rápidamente para irse corriendo al interior del auditorio, “porque son la mejor banda de México, del género que se trate”, afirmó Gabriel, quien dijo desconocer que anoche se presentaba el quinteto grupero.

El ambiente comenzó a ponerse más caliente, al igual que los ánimos, cuando desde el escenario comenzaron a ser interpretados éxitos como Ni parientes somos, No pude enamorarme más, Contrabando y traición, La puerta negra y Pacas de a kilo, sin duda los temas más representativos de “Los Jefes de Jefes”, que pusieron a bailar a diferentes parejas en el ruedo del auditorio.

Tratándonse de Los Tigres del Norte, gente del pueblo, que comenzaron desde abajo en la música y les tocó vivir carencias en sus familia, lo político no puede quedarse fuera de un concierto suyo, por lo que el tema de Arizona salió a relucir, pidiendo Jorge Hernández, voz y acordeonista del grupo, a los asistentes unir su voz en contra de la ley antiinmigrante: “Viva México y abajo la impunidad”.

Mostrándose atentos con el público, los integrantes de Los Tigres del Norte se paraban en las partes laterales del escenario para cantar frente a ellos, que tenían poca visibilidad de lo que sucedía realmente.

En una ocasión Jorge se dirigió a la parte posterior del entarimado, donde también había público, y firmó algunas prendas que le acercaron.
Los Tigres del Norte son del pueblo, eso está claro.

EL INFORMADOR/ OMAR CASTAÑEDA