El futbol hoy se escribe mucho mejor, según escritor mexicano

CIUDAD DE MÉXICO .- Reputado cronista de la pasión futbolera, el novelista mexicano Juan Villoro considera que "el fútbol hoy se escribe mucho mejor" gracias a la influencia en el periodismo deportivo de algunos escritores que se atrevieron a relacionar lo culto con lo popular.

"El fútbol hoy se escribe mucho mejor. Ha aumentado considerablemente el nivel del periodismo deportivo especializado en países como Argentina sobre todo, y España. Y desde luego en Inglaterra, que tiene una gran tradición al respecto", aseguró Villoro en entrevista con la AFP.

Esta preocupación por la reflexión y la calidad literaria no se hubiera alcanzado sin una serie de escritores que obviaron los prejuicios intelectuales y se ocuparon de contar lo que ocurre dentro y fuera de los terrenos de juego.

"Hubo desde la literatura un trabajo muy importante de precursores que rompieron complejos para que esto fuera posible. Como (Roberto) Fontanarrosa y (Osvaldo) Soriano en Argentina, (Manuel) Vázquez Montalbán en España o (Eduardo) Galeano en Uruguay", detalló.

Estos pioneros abrieron las puertas a otros exploradores de las hazañas y dramas futbolísticos como el argentino Martín Caparrós o el propio Villoro, un escritor que define su libro de ensayos literarios publicado el jueves, "De eso se trata", como un pase al hueco para que el lector tenga el camino libre a lo inesperado.

También contribuyó a esta nueva narrativa futbolística la incorporación de especialistas de otras disciplinas, como sociólogos o antropólogos, a las secciones deportivas de los medios. Todo este conjunto de elementos obró algo que Villoro considera casi un milagro.

"Está el fenómeno extraño, y hasta hace un tiempo absolutamente impensable, del futbolista que puede escribir bien. El caso emblemático es Jorge Valdano pero hay otros como los españoles Andoni Zubizarreta y Miguel Pardeza o el mexicano Félix Fernández", explicó el autor de "El testigo", premio Herralde 2004.

Distintas miradas para diseccionar un juego que nunca concluye con los tres pitidos del árbitro.

"El fútbol finalmente es la forma de pasión mejor organizada y mejor repartida en el planeta. Para entender una época hay que entender qué apasiona a una época. Y evidentemente esto se relaciona con otras pasiones como el erotismo, la amistad o la identidad; y con sus sombras: celos, xenofobia, victimismo", destacó.

Sostiene Villoro en su libro que consagró al fútbol, "Dios es redondo", que este deporte se juega en el césped y en la agitada conciencia de los espectadores, con lo cual la crónica debe vincular ambos territorios.

Relatar el fútbol, como escribir ensayos, es una necesidad "para los que somos aficionados a algún deporte o a alguna forma de arte porque sabemos que en cuanto podemos expresar nuestro entusiasmo se potencia el gozo estético".

Y uno de esos placeres para la vista nació en Rosario (Argentina) y se llama Leo Messi, el "gran talento individual que tiene el fútbol, algo nunca visto desde Diego Maradona", estimó.

Un jugador que sólo podría ser superado por la promesa de los genes que portará el hijo del 'Kun' Sergio Agüero y nieto de Maradona. Un futuro fichaje "prenatal", según Villoro, con el que ya se debe estar relamiendo algún jeque árabe o un millonario de la mafia rusa.