El festival de cine de Sundance cruza el Atlántico

LONDRES, INGLATERRA (25/ABR/2013).- El cine independiente vuelve a Londres de la mano del actor y director estadounidense Robert Redford, que presentó ayer la segunda edición del Festival de Sundance en la capital británica.

Considerado la Meca del Cine “indie”, el certamen fundado por Redford cambia de nuevo las montañas de Park City, en Utah (EU), por el gran pabellón londinense O2 Arena tras la buena acogida que tuvo la primera edición celebrada el año pasado.

“Nunca creí que el festival se fuera a establecer en otro lugar. La primera vez vinimos porque nos invitaron y pensamos que la mejor manera era hacerlo de forma pequeña para ver cómo iba”, dijo  Redford, de 76 años, en  rueda de prensa.

El festival, que inicia hoy y termina el próximo domingo,  ofrecerá decenas de proyecciones de películas y documentales independientes, así como actuaciones musicales y charlas.

De entre los 119 filmes que se proyectaron en enero pasado en la versión original de Sundance, la organización eligió 20, seis más que en 2012, para mostrarlos en los cines del O2 Arena.

Entre ellos se encuentra A.C.O.D., la opera prima del director Stuart Zicherman que sorprendió en Utah con la historia de un joven traumatizado por las alegrías y las frustraciones de la vida en la familia moderna.

The kings of summer, dirigida por el también debutante Jordan Vogt-Roberts, se verá en las pantallas del Sundance londinense durante este fin de semana.

La cinta narra la historia de Joe Toy, que decide escapar con su mejor amigo y un extraño hacia el interior de los bosques al no poder soportar más la complicada relación que mantiene con su padre, quien intenta controlar su vida.

“El lugar que debe ocupar el cine independiente es el de relatar las historias que nadie más cuenta”, señaló a los medios el director del Festival de Sundance, John Cooper.

Entre la veintena de filmes que se proyectarán hay nueve documentales, un género que siempre ha contado con el apoyo del encuentro cinematográfico estadounidense desde sus orígenes y que ahora ocupa casi el mismo espacio que las cintas de ficción.

“La emoción que transmiten es la misma que una película no documental”, subrayó Cooper, al tiempo que recomendó uno de ellos, God loves Uganda, una mirada crítica sobre el trabajo de los misioneros estadounidenses en el país africano.

Aunque el festival es más bien conocido por ser un evento cinematográfico, el programa incluye actividades que fusionan cine y música, como la proyección del documental History of The Eagles, que contará con la presencia de los miembros de la banda estadounidense.

Pese a que el actor Robert Redford está “orgulloso” de haber convertido Sundance en la Meca del Cine “indie”, reconoce que la situación de este tipo de producción “es difícil” por la coyuntura económica.

“El cine independiente siempre ha luchado por un sitio en el universo, porque el cine comercial no creaba espacios, por lo que se ha tenido que buscar nuevas rutas, que finalmente han ido creciendo”, apuntó el director de cintas como Lions form Lambs (2007).

Como indicó Cooper, lo más complicado para los realizadores de películas de bajo presupuesto es “llegar a las audiencias” en las salas, un proceso que requiere de muchos recursos económicos.