Dosis de metal con Hell

GUADALAJARA, JALISCO (18/MAY/2013).- Este año fue la Arena VFG la encargada de hospedar los miles de metaleros que se reunieron para recibir su dosis de Hell & Heaven Metal Fest. La primer jornada del festival, realizada este sábado 18, convocó a cerca de 25 mil seguidores de éste género, que se movían de un escenario a otro, a pesar de que la corta distancia entre uno y otro hacían que la acústica chocara afectando la apreciación de las bandas.

Fueron Paul Ryan, Mike Flores, John Longstreth y Jason Keyser de Origin, la banda norteamericana de death metal proveniente de Kansas, con sus complejas técnicas en percusión y voz, quienes comenzaron a dar vida al Heaven Stage a las 16:00 horas. Los 'headbangers' levantaron nubes de polvo con el solo movimiento unísono de cabelleras largas y espolvoreadas de tierra.

Luego de interpretar, entre otros, sus temas de Antithesis, la más reciente producción lanzada en 2011, prometieron regresar pronto.

Mientras tanto Dokken, con su hard rock estadounidense, recordaron a los primeros años de la década del ochenta, cuando el género comenzaba a ser aceptado por algunas cadenas de televisión musical. A pesar de comenzar con problemas en el audio del micrófono del vocalista Don, lograron reivindicarse tan sólo a los dos temas de haber iniciado, cerca de las 16:30 horas.

Pentagram destacó con acordes distorsionados en la guitarra y una batería Pearl más sencilla y sin recurrir al doble bombo. Su presentación fue prescedida por Urtikaria Anal, quienes atrajeron más público. No obstante con cerca de 100 espectadores ofrecieron buena sincronía entre sus dos guitarras y bajo.

Una de las bandas más esperadas fue Moonspell. Incluso el vocalista de Origin, Paul Ryan, bajó para estar entre el público y escuchar temas como Wolfshade, Love Crimes y Of Dream and Drama, así como una de las más esperadas: Alma Matter.

Poco a poco fueron acercándose al Heaven Stage para escuchar a Vital Remains, liderada por Tony Lazaro. Entre una gran cantidad de público lograron incentivar mares de cuerpos golpeándose los unos a los otros cuando Damien Boynton dijo: "Nadie se mueva hasta que yo lo diga", antes de escucharse Hammer Down The Nails. De la multitud salían con rodillas raspadas luego del intenso slam que se formó dentro de una cúpula de humo levantada del suelo.


EL INFORMADOR / RUBÉN GIL