Demián Bichir dará de que hablar en cine y televisión en 2009

CIUDAD DE MÉXICO.- La primera vez que Demián Bichir llegó a Estados Unidos, trabajó durante un año preparando guacamole en el restaurante de comida mexicana “El rosa mexicano”. En otro lugar fue “bartender” y de esos al que le decían “ve, corre, dile y tráele”.

“Trabajé en muchas cosas, menos en actuación. Pero las propinas eran buenas, de eso vivía”, recuerda el actor.

Han pasado 23 años de ello. Ahora Demián es conocido por interpretar a Fidel Castro en la cinta “El Che”, cuyo estreno ya se dio en Estados Unidos el año pasado.

También se le vio en la televisión estadounidense con “Weeds”, serie donde interpreta a un político mexicano con nexos en el narcotráfico.
Ambas producciones arribarán a tierra nacional este año.

“Esa época fue para mí de mucho aprendizaje. Era la primera vez que salía del cascarón, aprendí inglés y pues me sirvió como no me imaginaba para actuar”.
Por “El Che” recibió comentarios favorables del director Steven Soderbergh (“Traffic”) y hay quien lo ha colocado, como al actor Rodrigo Santoro (“Tropa élite”), en la terna de favoritos para el Oscar.

Pero el diario “Granma” de Cuba calificó su trabajo como falto de carisma y profundidad.

“Así son estas cosas. Yo he asistido a funciones donde la gente aplaude cuando me ve. Uno no puede controlar eso”, dice.
Demián también recibió la oportunidad para la televisión y con tan buen tino que junto con el elenco de la comedia “Weeds”, conocida en México como “La traficante”, está nominado al premio que anualmente entrega la Sociedad de Actores por mejor ensamble en una serie de televisión. Y vaya que ha colaborado para que la serie, hablada completamente en inglés.

Demián se incorporó a la serie que protagoniza Mary-Louise Parker, en el papel de una viuda que para sobrevivir vende mariguana, en la cuarta temporada.
“Propuse que (Esteban, mi personaje) fuera un tipo muy sofisticado, le gusta la ópera, el buen vino, fuma los mejores puros. Podíamos haber hecho a un político corrupto con todas las de la ley, pero ser educado lo hace más interesante”, explica Bichir.

Y habla de corrido sobre el personaje que pareciera un estereotipo que denigraría la imagen del mexicano.

“Lo que se cuente de México ya no es un estereotipo, ya es la realidad. Las noticias le llegan al mundo entero de esto que hay en el país, de políticos así, aunque no me baso en ninguno en especial,“ aclara.

“Si hubiera sido un personaje para mentir, de sólo hacer el chistorete, seguramente no me habría interesado. Hay que recordar que la serie también habla de la doble moral de la sociedad estadounidense y como es una comedia, entonces la serie se presta para llamarle por su nombre a las cosas”.

Demián no dormirá en este año 2009.

Espera que se concreten algunas invitaciones para cintas mexicanas y poder levantar su ópera prima como director, en donde contaría la transición de un chavo a hombre.

“Lo escribí yo, pero prefiero ya no decir nada más, sino hasta que se levante el proyecto”.