Das weisse Band se lleva la Palma de Oro

CANNES, FRANCIA.- En los grandes premios las sorpresas no tienen lugar: Das weisse Band, la película de Michael Haneke, partía como favorita de la crítica y recibió ayer la Palma de Oro en una edición de Cannes que también hizo un hueco para el polémico Anticristo de Lars Von Trier.

La actriz Isabelle Huppert, presidenta del jurado no tuvo que justificar porqué daba el máximo galardón del festival más prestigioso del mundo a un viejo amigo, un director austríaco llamado Michael Haneke que la hizo su musa en La pianista y El tiempo del lobo.

Das weisse Band, la escalofriante parábola que Haneke ambienta en los meses anteriores al estallido de la Gran Guerra, había ganado ya el premio de la crítica internacional FIPRESCI y partía como favorita para hacerse con la Palma de Oro, una situación que el director había vivido infructuosamente con La pianista en 2001 y Escondido en 2005.

"La felicidad es una cosa rara", comentó apenas conteniendo la emoción, "pero puedo decir que en este momento me siento orgulloso", dijo Haneke al recoger el premio.

Sólo el realizador francés Jacques Audiard parecía capaz de hacerle sombra con Un prophèt, su aterrador retrato de cómo un adolescente ingresa en la cárcel y acaba convirtiéndose en un carismático criminal. La película se quedó un escalón por debajo de Das weisse Band y ganó el Gran premio del jurado.

Se reparten los reconocimientos

Dos previos ganadores de la Palma de Oro -Quentin Tarantino y Lars von Trier- entraron por sorpresa en el palmarés con dos películas muy polémicas que fueron premiadas por su aspecto más indiscutible: sus excelentes interpretaciones.
Charlotte Gainsbourg definió su experiencia en Anticristo como la "más intensa, dolorosa y excitante vivida hasta ahora", al recoger el galardón a la Mejor actriz del festival.

Por su parte, la irreverente Inglourious Basterds tenía como punto fuerte al actor austríaco Christoph Waltz, todo un descubrimiento del filme de Tarantino.

El jurado de esta edición, pese a rendirse a lo evidente en los grandes premios, dio amplio cuartel al cine asiático, que formaba un verdadero lobby en el concurso.

Probablemente el galardón más sorprendente de la noche fue el que recibió el filipino Brillante Mendoza al Mejor director, por su hipnótica Kinatay, un perturbador relato en tiempo real del secuestro y tortura de una prostituta.

Por su parte, Lou Ye, el cineasta que en 2005 escandalizara al gobierno chino por presentar en Cannes Summer Palace sin pasar por el control de la censura, fue recompensado en esta ocasión por Spring Fever, una historia de amor homosexual rodada en la clandestinidad con ayuda de la coproducción francesa, y ganadora del premio a Mejor guión, escrito por Feng Mei.

Además, el coreano Park Chan-wook, que no había convencido a la prensa con su excéntrica visión del mundo de vampiros en Thirst, recibió el Premio del jurado, compartido, eso sí, con otra cinta que había dejado los ánimos tibios: Fish Tank, de la británica Andrea Arnold.

Finalmente, el jurado oficial anunció que, como viene siendo costumbre en los últimos años, había creado un premio especial para la figura de un director por toda su carrera. Esta vez, el merecedor de tal honor fue Alain Resnais, director que celebra el 50 aniversario de su emblemática cinta Hiroshima mon amour y que concurrió este año con la brillante comedia Les herbes folles.

Los ganadores

* Palma de Oro: Das weisse Band, de Michael Haneke (Austria)
* Gran premio: A Prophet, de Jacques Audiard (Francia)
* Premio del jurado: Fish Tank, de Andrea Arnold (Gran Bretaña) y Thirst, de Park Chan-wook (Corea del Sur)
* Mejor director: Brillante Mendoza, Kinatay (Filipinas)
* Mejor actor: Christoph Waltz, Inglourious Basterds (Estados Unidos)
* Mejor actriz: Charlotte Gainsbourg, Anticristo (Dinamarca)
* Mejor guión: Feng Mei, Spring Fever (China)
* Cámara de Oro (a director debutante): Samson and Delilah, de Warwick Thornton (Australia)
* Mejor cortometraje: Arena, de Joao Salaviza (Portugal)
* Premio Especial: Alain Resnais

Por cierto

La película Daniel y Ana, del director mexicano Michel Franco, finalmente no obtuvo la Cámara de Oro de este año del 62 Festival Internacional de Cine de Cannes, como lo deseaba el cineasta.

La producción cinematográfica que ganó el galardón, y premia a la Mejor opera prima del certamen, fue Sansón y Dalila, del director Warwick Thornton, anunció el jurado. Un total de 26