Clint Eastwood dirigirá por primera vez un musical

CIUDAD DE MÉXICO (01/ABR/2013).- El legendario actor y director estadounidense Clint Eastwood tendrá a su cargo por primera vez en su dilatada y exitosa carrera la realización de un filme musical.

Se trata de Jersey Boys, película que negocia en estos días con Warner Bros y que cuenta la historia del ascenso a la fama y posterior caída de Frankie Valli y los Four Seasons, autores, entre otras, de la célebre “Can’t Take My Eyes Off of You”.

El musical, ganador de numerosos premios Tony está escrito en forma de documental y retrata la formación, éxito y posterior ruptura del grupo.

La obra está estructurada en las cuatro estaciones, cada una narrada por uno de los componentes de la formación desde su propia perspectiva y para su nueva versión fílmica, cuando el proyecto estaba en manos de Columbia Pictures, estaba contemplado el director de Iron Man 1 y 2, Jon Favreau.

Un imprescindible en la historia del cine
Pocos homenajes y son muchos: no bastan para glorificar la figura de un imprescindible en la historia fílmica del mundo.

En 2011, apareció con su smoking impecable, sus 81 años en la espalda, sin que por supuesto se le noten, sonriente y satisfecho de sí mismo. Es Clint Eastwood, una leyenda presente luciéndose en el homenaje acontecido en la primera edición de Art+Film Gala 2011, celebrada en el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles (LACMA por sus siglas en inglés).

El motivo del encuentro fue reunir fondos para la realización de una película acerca de la programación del museo y para financiar exposiciones, adquisiciones y programas educativos que exploren la relación entre el arte y el cine.

La gala fue conducida por Leonardo Di Caprio, protagonista de la aventura cinematográfica de Eastwood, J.Edgar, que de hecho es lo último que hizo hasta ahora.

El admirado protagonista de Harry el Sucio y director de filmes emblemáticos como Sin perdón, Mystic River y Million Dollar Baby, entre otros, recreó la vida de uno de los personajes más controvertidos de la historia estadounidense, la del hombre que sistematizó el FBI y lo transformó en el moderno aparato de inteligencia que hoy conocemos.

La historia pertenece a Dustin Lance Black, el mismo que en el 2008 se llevó el Oscar a Mejor Guión, por su labor en Milk, protagonizada soberbiamente por Sean Penn.

La homosexualidad encubierta del todopoderoso hombre del FBI, quien habría mantenido una relación amorosa con su ayudante Clyde Tolson, es uno de los temas que trata la película de Eastwood, quien a sus jóvenes 82 años no tiene problemas en enfrentar temas duros y complejos en su cine de autor.

Hoover tuvo, además, fama de paranoico, racista, vengativo y chantajista, que solía intervenir los teléfonos de las figuras públicas, en una labor pionera que luego imitó Rupert Murdoch, según pudo verse en el escándalo de News of the worlds.

Hollywood Report comparó la película J.Edgar con la que es considerada la mejor película de la historia, Ciudadano Kane, de Orson Welles, un logro más entre los muchos que ha obtenido el bueno de Clint, quien no ha perdido su influencia en la industria ni su aura de leyenda a pesar de haber sido protagonista de dos hechos que lo tuvieron al borde del ridículo.

El primero es un reality que a cualquier persona en sus cabales (y el viejo Clint ha demostrado ya en varias oportunidades poseer una inteligencia superior) sonrojaría y haría mirar para otro lado.

¿Qué llevó a Clint Eastwood, uno de los cineastas más prestigiosos y respetados del mundo, a aceptar el proyecto de un reality alrededor de su figura?

Al igual que Ozzy Osbourne, Gene Simmons y Jessica Simpson, entre muchos otros, ahora está Mrs Eastwood & Company, el show de E! que se mete en la casa de Clint Eastwood para mostrar la intimidad de su familia.

Especialmente la relación entre su esposa Dinah, sus hijas Francesca y Morgan, el ama de llaves y un grupo de cantantes sudafricanos que vive en el hogar luego de que fuera adoptado por la señora de la casa durante la filmación de Invictus.

Normalmente parco e introvertido, fuera de su amor por el jazz y su fidelidad al Partido Republicano, es más lo que desconocemos de Eastwood que lo que podemos adivinar a través de su habitual cara de póker.

“Para ser honesta, no está demasiado contento. Preferiría que yo me dedicara a ir a jugar al golf con él, pero lo acepta porque quiere que yo sea feliz”, dice la explosiva Dinah, la última esposa de una larga lista que incluye a la actriz Frances Fisher.

Las críticas no se hicieron esperar y es normal que el entorno intelectual en el que se desenvuelve el afamado cineasta no vea con buenos ojos que a partir de ahora se lo compare con la basta familia Kardashian.

Del otro hecho un tanto bochornoso es absolutamente responsable y corresponde a su participación campaña electoral donde, como es obvio, Eastwood eligió apoyar al candidato republicano.

Hizo expresa y ostensible su preferencia por Mitt Romney el 31 de agosto pasado, en el marco de  la convención republicana, hablándole a una silla vacía en un acto que llamó “Obama Invisible” y que causó furor en las redes sociales, donde el actor fue ridiculizado hasta el hartazgo.

Sin embargo, Eastwood es mucho Eastwood y los hechos mencionados no parecen haber hecho mella al enorme y merecido prestigio del que goza en la industria del cine más poderosa del mundo.

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