Charlize Theron, dueña de sí misma

Es bella y exigente. Las cámaras la adoran, antes de cumplir los 30 años recibió el Oscar como Mejor actriz por su interpretación de Aileen Wuornos en Monster. No le preocupa modificar su apariencia para interpretar un papel; sin embargo, es un rostro por muchas marcas solicitado, recientemente la viva imagen de la elegancia para Dior.

De raíz sudafricana, el glamour de Hollywood se vio gratificado con su presencia bajo los reflectores y ahora su nombre en la taquilla habla mucho más que de una cara bonita, sin embargo Charlize tuvo que romper con los tabúes propios de una novel actriz extranjera frente a una industria tan exigente como la de la Meca del Cine.

Descubierta como modelo, Theron debutó en Hollywood con la cinta Children of the corn II en 1995, un thriller olvidable en el que recibió el crédito número veintitrés. Diez años más tarde los directores destacados e independientes buscarían recibir un sí para sumarse a sus proyectos.

Ahora, a sus 35 años, Charlize recuerda sin dolor el incorporarse a una industria que ahora la adora. “Todo actor siente que tiene que probarse a sí mismo, especialmente si vienes de una carrera de modelo. Fui muy afortunada por tener un montón de directores que me dieron oportunidades por las que tuve que pelear también para romper ese prejuicio”.

En plenitud personal y profesional

Como pocos actores extranjeros en Hollywood, Charlize, quien vivió parte de su vida profesional como modelo en Europa, dice sentirse plena en el cine estadounidense. “Mucha gente no tiene las opciones que yo tuve, de viajar siendo tan joven y de ver el mundo con tus propios ojos. Puedes sentirte de vez en cuando como ‘un pez fuera del agua’, pero siempre es una aventura, es excitante y te permite conocerte a ti misma”.

Y dicho autoconocimiento la hace sentirse orgullosa de su origen sudafricano; sin embargo es muy clara al expresar que el compromiso es siempre consigo misma. “Yo soy responsable por mí misma. Volver a mi país natal fue algo muy importante. Fue bueno volver después de ganar y recibir tanto apoyo y tanto cariño de parte de la gente. Pero no siento una responsabilidad respecto a todos los sudafricanos”.

No es amante de los escándalos, y más allá de seleccionar sus papeles por el nombre del director a cargo, elige sus proyectos en torno a la temática y complejidad del mismo, por lo que lo mismo se arriesga frente a las cámaras y detrás de ellas pues en su historial fílmico también la producción ejecutiva se encuentra entre sus talentos. Monster, East of Havana, Sleepwalking y The Burning Plain, dirigida por Guillermo Arriaga son algunas de las cintas en las que ha apostado como productora. “Me interesa trabajar con buenos directores que también sean buenos seres humanos, y que sepan mirar el mundo de una manera interesante”.

Combinación perfecta

Belleza y talento es una combinación por pocos aceptada, sobre todo con un crecimiento profesional tan sorprendente. Charlize hace caso omiso a las críticas, se sabe bella pero no lo subordina a su capacidad histriónica y critica los prejuicios que suelen hacerse en torno a las mujeres en la industria. “La gente cree que una no sufre porque es linda. Es una tontería. No lo entiendo”.

Es por ello que Theron es un espíritu libre, no se aferra a la velocidad de las grandes urbes y prefiere la tranquilidad de los suburbios. “Vivo fuera de la ciudad y de la industria, en el medio de la naturaleza, rodeada de coyotes, perros, pájaros, un jardín enorme. Buena temperatura, linda gente. Me gusta estar rodeada de amigos, son como mi familia. Me hacen ver el mundo de manera diferente. Son gente inteligente, la paso bien”.

Recientemente Charlize posó para la revista GQ envuelta en una sábana, las fotografías despertaron cualquier cantidad de opiniones y la actriz no vanaglorió su cotizada imagen, pero fue enfática al señalar que no busca que su vida sea de todos conocida, no se considera una celebridad. “Ese tipo de personas me parece horrenda. Hay gente que no quiere que se ventile su vida privada, pero lo hacen a propósito porque creen que beneficiará a su carrera, pero yo lo veo terrible. Mi vida no le pertenece a nadie”.

Por el León de Oro

Este es un momento importante para Charlize, ya que el próximo miércoles dará inicio el Festival Internacional de Cine de Venecia, donde probará suerte junto al escritor y ahora director mexicano Guillermo Arriaga con la cinta The Burning Plan en la que también participa como productora ejecutiva. “La experiencia con Arriaga fue alucinante, trató de enseñarme español, pero no pude (risas) y es algo que debo aprender, ya que vivo en California y todos allí hablan español. Respecto a la película es una historia excelente que cumple con mis expectativas”.

La trama de la cinta gira en torno a una serie de historias paralelas (un sello del cineasta) donde Theron encarnará a una hija arrepentida que intenta acercarse a sus padres. Por su parte, Arriaga ha expresado que en The Burning Plain se tratarán una vez más los temas que siempre le han preocupado, como la existencia de los muertos sobre los vivos, las relaciones amorosas clandestinas y el amor, “pero no como un sentimiento cursi y banal como lo han trivializado algunos medios de comunicación, sino como un sentimiento profundo, paradójico y contradictorio”.

FRASE
“Para mí lo importante es la longevidad, trabajar mucho tiempo, tener una carrera. No estar en películas que desaparecen”

Charlize Theron, actriz