César Cosío tiene en la mira nuevos horizontes

LAS VEGAS, NEVADA.- Rusia y La República Checa han sido sus más recientes destinos. También Tokio, en Asia y Perú en Sudamérica. Algunas ciudades de Estados Unidos, y sobre en todo en Las Vegas, donde hoy por la noche el DJ tapatío César Cosío será el encargado de programar la música del afterparty del boxeador Manny Pacquiao una vez que concluya la pelea que celebrará el deportista contra Ricky Hatton en el hotel MGM de aquella ciudad. Sin duda, el también fundador de Organización Zepellin, como él mismo lo expresa es momento “de abrir nuevos horizontes.

Cosío se define como un DJ ecléctico. Alguien que ama la música y que programa en el momento, recurriendo siempre a la improvisación, basta que su sensibilidad haga su trabajo para que casi de inmediato los invitados a los festines se integren. Sin embargo nada ha sido al vapor. César, conciente de que los logros en la vida se dan a través de procesos, admite que aun cuando le hubiese gustado conquistar sitios fuera de su país desde hace 20 años, lo cierto -afirma- es que desde hace tres años es cuando más claro ha estado el camino. Fruto nada más de su trabajo.

El toque latino, una especie de sello de la casa, es lo que considera aprecian quienes lo escuchan tras los límites de nuestras fronteras, pues gracias a sus constantes viajes, César se ha percatado de la diferencia de la concepción de la música en los distintos puntos donde se ha presentado. Confianza en lo que hace ha sido la clave. “Hago lo que me gusta y la gente lo acepta muy bien, porque uno debe creer que lo que hace es bueno. Tenerse confianza, sino sería muy difícil manejar los distintos ambientes, con culturas diferentes. Hacerlo sin temor”. Cada fiesta toma su cauce -dice.

Su sendero como programador lo muestra el lugar donde a diario agenda sus fechas y prepara sus fiestas. Las paredes de sus oficinas ubicadas en el fraccionamiento Monraz no escuchan, más bien hablan de las tres décadas que ha dedicado a un oficio que él mismo se forjó. Cientos de fotografías muestran sus ir y venir. Cualquier tipo de festejo puede observarse en algunos de los cuadros. Aniversarios, bodas, bautizos y más. Discos de vinil, cassettes, cd´s y dvd´s le rodean.

Sus sueños poco a poco han ido tomando forma. Lo mismo ha organizado eventos privados que públicos. Para personas de la tercera edad también ha dedicado un tiempo. A los aprendices de DJ los ha ido formando en talleres gratuitos que imparte en la Vía RecreActiva y que pronto montarán un festejo de graduación. Actividades que por ahora están detenidas pero que pronto retomará.

Y es que la pausa obligada que vive nuestro país en estos momentos, debido a la epidemia de influenza humana, es -asegura Cosío- una oportunidad de recargar pilas, al tiempo que afirma que la cancelación de al menos 30 de sus compromisos no es motivo para bajar la guardia. Un evento llamado la Fiesta del espacio a celebrarse en el Centro de nuestra ciudad ha quedado pendiente al igual que una presentación en el Zócalo capitalino, mas no su energía para seguir adelante. “Sé que estamos en tiempos de reflexión, de meditación. Pero después de la tempestad viene la calma y después de la calma surge la euforia. Estoy seguro que toda la energía saldrá cuando superemos la problemática sanitaria que ahora nos afecta”.

El resultado de más de 30 años de ser “un sabueso de la música” se concentra en el acervo musical que César posee como uno de sus tesoros más preciados, que sin embargo en un momento dado sabe tendrá que ceder, para que los más de 24 mil discos no se queden en el olvido. “Tengo una colección de más de 24 mil discos, todos originales, no compro piratería por ética, por convicción. Ya he pensado qué pasará con este acervo y creo que lo ideal sería que alguno de mis hijos decida continuar con mi pasión por la música, de otra manera buscaré un ‘Plan B’”. Por lo pronto y mientras se reactiva la vida en nuestro país, Tailandia será el siguiente destino de César Cosío a finales de mes, cumpliendo así el sueño de internacionalizarse como un talento 100% tapatío.