Carlos Bolado presenta su visión de Tlatelolco

GUADALAJARA, JALISCO (16/MAY/2013).- ¿Qué es lo que hay detrás de un hecho histórico relevante? ¿Son sólo los héroes y los villanos quienes merecen pasar a la historia? ¿Y qué pasa con el resto del mundo? ¿Qué ocurre con la vida de toda la gente cuya rutina se ve absorbida por un momento que cambia a una nación? Esas son las preguntas que el director Carlos Bolado plantea en ''Tlatelolco: Verano del 68'', largometraje que mañana llega a las salas de cine tapatías.

Quien haya seguido la carrera del realizador notará que el tema le apasiona. Bolado ya realizó hace un par de años un documental sobre el movimiento estudiantil y la masacre ocurrida en la plaza de Las Tres Culturas, en la capital del país. Ahora regresa a Tlatelolco, pero deja el formato de documental y toma una historia ficticia envuelta en un hecho real.

Carlos Bolado llegó el miércoles a Guadalajara para promover el estreno del largometraje, y lo hizo acompañado por Christian Vázquez y Claudette Maillé, quienes participan en la cinta. Él como un idealista que quiere cambiar al mundo; ella como la madre de la protagonista, conservadora y enemiga de los cambios sociales.

El interés del realizador en el movimiento estudiantil mexicano no es nuevo. De hecho, es difícil encontrar hoy en día alguien que tenga más datos, entrevistas e investigaciones sobre Tlatelolco que él. “En 2007 comencé a hacer un documental por los 40 años de la masacre de Tlatelolco, que se pasa cada año en 2 de octubre en OnceTV”.

Mientras habla, Bolado gesticula de forma notoria. Se asemeja más al director de una orquesta y no tanto al de una película. Tlatelolco es un tema que le apasiona. Uno donde se ha sumergido, tratando de explorar todos los ángulos posibles. “Después de hacer el documental, comencé a trabajar en una serie de televisión de 12 capítulos, que se filmó al mismo tiempo que la película. Eso fue en 2010”.

Y el tiempo voló. Luego de tres años de espera, varios aplazamientos y tentativas de estreno, la película finalmente ve la luz; aunque esto no es el desenlace para el realizador, pues ahora tiene que enfrentar un nuevo reto: la crítica.

El poder de saber

Mientras que otros directores optan por dejar que sea su obra la que se defienda como pueda ante sus críticos, Carlos Bolado decidió salir a dar la cara ante todos los señalamientos. Él sabe que el tema del movimiento estudiantil de 1968 polariza, levanta ámpula y convierte cualquier plática casual en una discusión.

La cinta ya se exhibió en festivales y en algunas ciudades de México, y con su proyección llegaron todo tipo de opiniones, desde señalamientos fundados, hasta opiniones francamente destructivas e incluso ofensivas.

Para Bolado, algunas de las reseñas y críticas de la película han sido de gente “que a veces ni la vio, o entra a la sala con la predisposición de encontrarle defectos, porque siempre es más fácil eso”. Enfatiza que su cinta no es una lección de Historia, “porque para eso ya hice un documental, allí están los datos, las fechas. Esto es una historia de ficción que se enmarca en un acontecimiento real”.

En medio de la turbulencia en la que se vivía en los años sesenta, el director no encuentra descabellado que una historia de amor haya ocurrido en Tlatelolco por aquellas fechas. “Los alumnos prácticamente vivían allí. ¡Está documentado!, hubo líderes estudiantiles que allí conocieron a su pareja, que ahora son abuelos, ¿cuántas historias de amor y desamor no ocurrieron en los edificios de la UNAM?, ¿que por qué meto una historia de amor? ¡Pues porque es una película de ficción!”

“Tratamos de abordar la Historia desde una perspectiva más humana, no necesariamente quedarnos con lo que dicen los libros. Es un proyecto arriesgado, pero lo aceptamos como un reto, siempre respaldados por Carlos, que está muy empapado del tema”, explica Christian Vázquez, quien en la película encarna a Félix, protagonista masculino y que vive una historia de amor al lado de Ana María (Cassandra Ciangherotti).

“Para los jóvenes de la época también fue (un movimiento) lúdico, fue una cuestión juguetona, sentían que de verdad iban a cambiar el país, que se reían, que cantaban muchísimo. Y luego vino la masacre. Todo eso lo mostré, no me quedé en el drama, en el ‘martirologio’ de siempre”, agregó el director. Bolado no siente que la película le falle a quienes participaron en el movimiento. “Hicimos una función de prensa con gente y familias de personas que vivieron de primera mano la represión de 1968, y les gustó lo que hicimos. Creo que las opiniones más justas las he encontrado entre la gente que la va a ver, y no entre la crítica”.

POR CIERTO

Viene la serie

Para Carlos Bolado, el tema de 1968 no está cerrado. Ya hizo un documental, y al mismo tiempo que rodó la película, hizo una serie de televisión, con los personajes del largometraje, además de otros que quedaron fuera de la edición final. “Allí podemos contar la historia sin la limitante del tiempo que implica el cine”.

El proyecto estará compuesto por 12 capítulos, y se espera que llegue a la televisión en octubre. “La fecha no depende de mí, pero sería lo ideal para conmemorar los 45 años de la masacre en la plaza de las Tres Culturas”, remata el director.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Amor en tiempos turbulentos

Es el año 1968 y México se prepara para celebrar la olimpiada. Pero el verano es turbulento, con manifestaciones estudiantiles tomando las principales calles de la Ciudad de México. El pensamiento libre y revolucionario de los alumnos de diversas universidades, choca de frente con la rigidez del gobierno de aquella época.

En medio de esta situación, nace el amor entre Félix (Christian Vázquez) y Ana María (Cassandra Ciangherotti). Él, un humilde estudiante de arquitectura de la UNAM; ella, una chica fresa que estudia en la Ibero. Ambos se verán arrastrados a un conflicto que marcará su generación.