México.- Ni el frío, ni el viento o la lluvia pararon el Coca cola Zero Fest 2008, al que asistieron cerca de 30 mil personas, y tuvo un cierre espectacular este sábado, con las bandas estadounidenses Smashing Pumpkins y The Mars Volta, en el Autódromo Hermanos Rodríguez.La gente inundó la curva cuatro de la pista de carreras de la ciudad deportiva, lugar en el cual los organizadores habían colocado dos escenarios, para dividir el cartel que agrupaba a exponentes tanto nacionales como extranjeros.El inicio fue puntual a las 14:00 horas, con la banda Le Baron, quien tuvo la fortuna de ofrecer un buen espectáculo, pues el clima caluroso de mediodía aún se dejaba sentir en el terreno, situación que también fue aprovechada por el grupo Gusana Ciega, quien abrió en el otro escenario y Jumbo.Sin embargo, el clima caluroso que pronosticaba el día duró poco, pues cerca de las 16:00 horas comenzó el cielo a nublarse y amenazó con una lluvia que para las 17:00 horas, ya era una realidad.Por lo que, muchos de los presentes que llegaron con ropa de primavera, tuvieron que adquirir alguno de los impermeables de hule que los ambulantes comenzaron a mercar.Una de las ventajas que tuvo el Festival fue la organización de las bandas, ya que los horarios de los escenarios estaban desfasados de tal manera que en su mayoría, terminaba una banda e inmediatamente la gente podía pasarse al otro foro, para disfrutar de la música.Además la cercanía de los escenarios y la logística del lugar permitían un desplazamiento rápido, a diferencia de otros festivales como el Vive Latino, donde se hacen cuellos de botella en algunos puntos, a la hora de querer pasar de un lugar a otro.Kinky tuvo un desempeño favorable en el escenario, la gente gozó de su actuación bailando temas como Presidente, Más, ¿A dónde van los muertos? y Sound tha mi primer amor.Mientras que My Chemical Romance gozó de un público juvenil dispuesto a escuchar su propuesta, contrario a lo que se había rumorado sobre un supuesto boicot a lo largo de la semana a través de Internet.Los estadunidenses llegaron con mucha fuerza al escenario, un rock bien estructurado empezó a fluir entre la rasposa voz del vocalista de la banda, Gerard Way, con temas como Kill all your friend, Welcome to the black parade y I'm not ok.Asimismo, recordaron lo bien que se la habían pasado en su anterior actuación en México, por lo que destacaron como uno de los pocos, donde "nos las pasamos genial".Quien sobresalió por lo frenético de su actuación, fue el grupo The Mars Volta, con su rock alternativo lleno de cambios bruscos y ritmos latinos, al llevarse la noche en el escenario rojo, a pesar de la lluvia, que volvió a caer de manera ligera.La banda comandada por Cedric Bixler Zavala se dedicó a improvisar en su mayoría, aunque de repente eran audibles algunos temas que el guitarrista Omar Rodríguez sabía disimular entre potentes y psicodélicos riff, que acompañados por su pedalera se difuminaban entre melodías azarosas.Cedric como parte de su epiléptica personalidad, le gritó a la cámara, danzó por toda la tarima y finalmente aventó el atril del micrófono al público, no sin antes rociar un extinguidor entre las personas que se encontraban más cerca del escenario, lo cual no hizo más que acrecentar entre el público su acelerada presentación.Para las 22:00 horas, el grupo The Smashing Pumkins estaba listo para salir al escenario negro, aunque The Mars Volta todavía hacia de las suyas en el espacio alterno.Los de Chicago no aguantaron más y abrieron con Today, ante una ligera ovación que se perdía entre los retoques de sus compañeros de profesión, que aún se encontraban del otro lado en su delirio musical.Sin embargo, eran miles los que aguardaban su presentación, por lo que de inmediato mucha gente corrió del escenario rojo al otro para no perderse detalle de una de las actuaciones del recuentro más polémico, pues si bien era Smashing Pumkins, quien estaba tocando, sólo eran dos de los cuatro miembros originales de la mítica banda noventera.Disarm, 1979, Tonight, Tonight, Tarántula, Stand inside you love, Home, Muzzle y Nerverlot fueron los temas que inundaron de nostalgia el Autódromo Hermanos Rodríguez, pues la mayoría de jóvenes acentuaba y se desvivía entre frases y letras que Billy Corgan inmortalizó, ante una generación hace más de una década.Por momentos se dirigió al público para romper la barrera del idioma y trató de hablar español: "¿Cómo están?" y de inmediato recibió la respuesta con una ovación de personas que se quedaron hasta el final para disfrutar de su actuación. AGP 13/04/08