Arjona se sumerge en los sueños

CIUDAD DE MÉXICO.- En ningún momento Ricardo Arjona se ha sentido falto de creatividad, pero sí ha luchado contra ese monstruo que lo ha amenazado con agotarle la productividad.

Ricardo ha madurado, ya no es el mismo de Jesús es verbo no sustantivo y de Te conozco, en su nuevo disco, Quinto piso, la inspiración se le apareció. “Por suerte he tenido siempre un rescate, que no he sabido de dónde ha venido, he pasado tres meses de no poder escribir una canción y uno padece mucho estas lagunas, hasta que de repente te aparecen dos canciones y sabes que regresó, pero de todas formas no trato de forzar el proceso, porque debes de sentir y nunca hacerlas por obligación”, platicó el guatemalteco.

Arjona se describe como un tipo que suele improvisar como arma de sobrevivencia, pero su mejor virtud y la cual ha explotado en este disco es la de ser un buen escucha. “Ahora sé que me gusta más escuchar, antes hablaba mucho, ahora me gusta más escuchar y cuando hay una reunión, yo prefiero callarme y escuchar, porque aprendes más”.

De ahí que invitara a la cantante Paquita la del Barrio a participar en una canción para este nuevo disco. Pero ¿cuál fue la sorpresa del compositor que al sentarse a platicar con ella, descubrió que Paquita, casi no habla? “Lo importante es que la canción tiene la esencia de los dos, pero lo más
importante es que yo la escribí sin pensar en Paquita, entonces cuando terminé la canción y comenzamos con los arreglos, supe que la tenía que cantar con ella, se la puse y le gustó, entonces decidimos cantarla juntos”.

El mundo lo inspira
En la actualidad, sus canciones emanan de las pláticas y de lo que escucha de las personas, más que de las experiencias a bordo de un taxi. “Hay una canción aquí que se llama Que nadie vea, que es la historia de un homosexual, desde niño hasta viejo, en esta historia soy simple observador, y fue producto de cosas que me han platicado algunos con amigos que lo han vivido.

Agrega que “hay otras canciones que te pertenecen a ti, que son autobiográficas, entonces lo que yo siempre he comentado… de una hoja en blanco tú puedes inventar un mundo”.
De aquella época cuando salía con su guitarra y ahora a la de no poder salir a la calle por el tumulto que provoca, Ricardo dice: “La gente ve el inicio como la época dura, cuando no tenías plata para pagar la renta, pero era más divertida que la de ahora”.