Allison, en franca rebeldía

GUADALAJARA, JALISCO.- Se llaman Allison, pero no hay chicas en su banda. Son parte de la vanguardia del rock nacional, esa nueva generación formada en la decadencia de las disqueras y el auge del internet. Se han definido por haber tomado un camino nada convencional en un mar de nuevas propuestas y hasta ahora les ha funcionado de maravilla, y eso sí nada más nos apegamos a los números: Su placa debut fue Platino y el segundo ya es Oro. Han vendido casi un cuarto de millón de discos y su sitio de internet es el segundo en el ranking de bandas en español, atrás de RBD. Están por embarcarse en una gira que los llevará por Sudamérica y los sonidos de un tercer disco comienzan a aparecer en su mente. Pero más allá de las cifras que se cuentan en millones, las giras continentales y los premios que ya no tienen donde poner, dentro de Allison se siente satisfacción por no haber vendido “el alma al diablo” cuando decidieron aventurarse en el mundo de la música.

Erick, el vocalista de la banda, platica sobre el éxito que ha cosechado Memorama y el lanzamiento de su segundo sencillo, Baby, please. Su voz, a través del teléfono, es una mezcla de satisfacción y agotamiento, pues no han parado de trabajar este año y la “chamba” ya está segura para 2009. Mientras habla, desentraña los secretos que han llevado a Allison a estar en la cima y promete que lucharán duro por quedarse arriba.

¿Cómo cierra el año Allison?
“Muy contentos, sorprendidos por el éxito de Memorama, un disco que nos encanta, que hicimos con el corazón, no con dinero. Con muchos conciertos, con el segundo sencillo, viajando por todos lados, y emocionados por lo que viene para el siguiente año, ya preparando lo que será el tercer disco, que apenas está en fase de maqueta”.

Muchos músicos le tienen miedo al internet, ¿cómo es que lo lograron ustedes tener una base tan fuerte en el ciberespacio?
“Ahora la música tiene distintas maneras de llegar a la gente, y nuestra generación le tocó la distribución de música a través de la red y nos apegamos a esa “regla”.  Le debemos mucho a nuestro Myspace, que es muy concurrido.  Tratamos de tenerlo bien actualizado, bonito, que la gente cheque las fechas allí, contestar todos los comentarios que nos dejan”.

¿Todos?
“(Risas) Bueno, es que sí, a veces son tantos que es imposible, pero tratamos de hacerlo. Somos la banda mexicana número dos en cuanto a visitas, creo que sólo RBD está arriba de nosotros, y con el apoyo que tienen atrás, pues sería raro si no”.

Mencionas que están preparando el tercer disco, ¿Qué temas van a abordar ahora?
“No sabemos todavía. No nos gustaría tampoco ponernos a hablar sobre algo que desconocemos. Quiero pensar que somos como unos juglares, narramos lo que vemos en la vida, el amor, la fiesta. Creo que la gente aprecia que seamos una banda bien sincera, que no tiramos choro como otros que critican a gobiernos, pero traen su BMW y les vale. No tenemos una máscara o un papel, somos ante la gente tal y como somos. Si llegamos a hablar de otros temas será porque estamos a gusto con lo que hacemos”.

¿Nunca han tratado de cambiarlos? Proponerles que usen disfraces, hagan una coreografía o una tabla gimnástica…
“Precisamente cuando comenzamos la banda, en los días que negociábamos con la disquera ese fue el tema, nos decían 'oye, nosotros queremos que hagan esto y aquello sobre el escenario'. Y dejamos claro que no, que teníamos una idea muy clara de lo que éramos y queríamos que se respetara el concepto de la banda, que no se moviera un ápice, si no, no firmábamos. El día que nos pongan trabas para ser una banda más del montonazo, diremos, ‘ok, se acabó, cada quien a hacer lo suyo’. ¡Sí nos dolería eh! (risas), pero la música tiene una manera de sentirse, si lo hacemos falso seríamos uno más, como muchos que ya hay”.

¿De quién aprendieron este sentido musical?
“Hemos compartido escenario con muchas bandas. Creo que una de las que más admiro es Molotov. Son chidos, nos enseñaron a tener los pies pegados en el piso y a no subirnos a un ladrillo y marearnos, porque este medio es tan errático que al final del día no sabes dónde vas a estar, puedes estar muy abajo o muy arriba, y es hasta cierto punto ridículo marearte y no darte cuenta que como llegas puedes desaparecer”.

Por cierto
Allison vienen a Guadalajara el 9 de diciembre. En el D.F. tendrán una fecha el 13 de ese mes en el Hard Rock y la gira por Sudamérica será el próximo año. Erick espera pasar Navidad en su casa con su mamá, pues sabe que Santaclós batallaría mucho para encontrarlo en plena gira.

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