'A los ojos', una realidad que duele

GUADALAJARA, JALISCO (28/MAY/2016).- Partir de la ficción y adentrarse a la realidad es un reto que los hermanos Franco, Michel y Victoria, aceptaron enfrentar para retratar las complejidades del sistema mexicano de salud pública, los niños en situación de calle y su vulnerabilidad ante una sociedad que pasa desapercibida e indiferente a las carencias y riesgos a los que diariamente están expuestos.

Esta la primicia de “A los ojos”, largometraje dirigido y escrito por los Franco —a estrenarse hoy en el Cineforo de Guadalajara— y en el que exponen las problemáticas y realidades que desata la necesidad de una madre de familia por lograr que su hijo obtenga un trasplante de córneas al ver que el sistema de salud pública no es capaz de dar solución a su urgencia o ver se resignada a que su pequeño pierda la vista a causa de una enfermedad degenerativa.

A raíz del cortometraje “Entre dos”, que Michel Franco realizó hace 10 años, el par de directores decidieron retomar parte de la historia y reflejarla de la manera más realista posible, no sólo tomando la experiencia documentalista de Victoria y el talento de la actriz Mónica del Carmen (ganadora de la Cámara de Oro en Cannes 2011), también buscando a personas de la vida cotidiana —sin formación actoral— para que interpretaran y compartieran en pantalla lo que día a día viven, como Benjamín y Omar, niños protagonistas de la trama.

“Estuvimos en la calle diario durante meses para obtener las escenas. Hay mucha improvisación entre la ficción y el documental, lo que iba pasando en la calle lo adaptábamos a la ficción y en la ficción yo lo trabajaba desde una parte documentalista. La única actriz es Mónica, la película tenía que ser con gente real, porque nadie puede actuar lo que estos niños viven, y actuado puede resultar algo muy estereotipado o exagerado”, comentó Victoria Franco en entrevista con EL INFORMADOR.

Perfeccionando el camino

Tras presentar “A los ojos” en el Festival de Morelia en 2013, Michel y Victoria decidieron restar 30 minutos de la historia para brindarle un ritmo más ágil y concreto, y así el espectador pudiera digerir inmediatamente las reflexiones, cuestiones, denuncias y situaciones que se exponen sobre la vida infantil en la calle y los procesos burocráticos del sistema sanitario.

“Nos llama la atención y nos preocupan los contrastes sociales que hay en México, como a veces se le pone valor a una vida y a otras no cuando todos valemos lo mismo, de cómo puede desaparecer una persona en situación de calle y nadie se da cuenta porque esos niños tienen un índice de vida corto por el consumo de drogas, son atropellados o asesinados y es muy fácil desaparecerlo, mientras que el sistema de salud con el trasplante de córnea es muy lento”.

Victoria Franco destaca que “A los ojos” sigue concretando una ruta de exhibición favorable gracias al impulso que brindó la Cineteca Nacional, además de que se analiza la posibilidad de que la película retorne a las salas comerciales en próximos meses al terminar la gira independiente que tiene por las ciudades más principales del país hasta llegar al festival checo de Karlovy Vary en marzo de 2017, y de ahí seguir a Polonia.

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“A los ojos”, bajo la dirección de Victoria y Michel Franco, se estará proyectando desde hoy y hasta el 2 de junio en el Cineforo, ubicado en Avenida Juárez y Enrique Díaz de León.

Para los interesados a disfrutar de esta cinta, el costo del boleto es de $45 pesos, en tanto que estudiantes y universitarios con credencial pagan $10 pesos. Una excelente opción para apoyar al cine nacional en un foro con mucho sabor tapatío.

Una historia que toca la realidad sin matices

A veces la frontera entre la ficción y la realidad está marcada por una línea extremadamente delgada. Y los ejemplos abundan en esta cinta.

Benjamín Espinoza es un niño de la calle, que ahora tiene unos 17 años y fue elegido como protagónico de la película “A los ojos”. Nadie podía imprimir mayor realismo y dolor a su papel que él.

No tuvo pago por su actuación en la cinta, pero durante su estancia en el rodaje, que se llevó a lo largo de dos años, ya que requería cierta parte documental, aprendió a hacer sonido en el mundo del cine.

La petición económica fue decisión de Casa Alianza, dedicada a la atención de infantes en situación de calle que colaboró en el filme y que tampoco recibió dinero alguno, dijo en su momento Sofía Almazan, una integrante de dicha institución.

De acuerdo al diario El Universal, “la verdad es que no tuvimos que tocar muchas puertas (para estrenar el filme) cuando nos acercamos a Latam les llamó la atención y creo es la mejor opción, se necesita cuidarla mucho, es una película que requiere eso”, señala.

A sus 34 años, Michel Franco ganó en el Festival de Cannes el premio a la mejor película (“Después de Lucía”) en la categoría de “Una cierta mirada”. Y aunque de pequeño sentía inclinación por la música, fue hasta su vida universitaria que logró conjugar el cine, la fotografía y la música en la carrera de Comunicación (la cual posteriormente abandonó para dedicarse por completo al cine). Durante mucho tiempo, y con la finalidad de ir aprendiendo, se dedicó a filmar sus propios cortos.

LA FRASE

“En el cine no hay fórmulas”.

Michel Franco, cineasta.

EL DATO
Amado por la crítica

Michel debutó en el campo de los largometrajes con la cinta “Daniel y Ana” (2009), con el que se ganó el aplauso de la crítica. Posteriormente sorprendió con “Después de Lucía” (2012) y recientemente presentó “El último paciente: Chronic (2015)”.