Presidente de Paraguay busca incrementar el IRP

ASUNCIÓN, PARAGUAY.- El gobierno del presidente paraguayo Fernando Lugo busca evitar una nueva prórroga del Impuesto a la Renta Personal (IRP), cuya reglamentación final todavía es materia de discusión entre el Ejecutivo y empresarios.

El Poder Ejecutivo espera que en el transcurso de este mes queden en el pasado las trabas para que entre en vigor el gravamen, cuya vigencia ha sido postergada en varias oportunidades.

El IRP fue uno de los principales componentes de la Ley de Reordenamiento Administrativo y Adecuación Fiscal promulgada en 2004, pese a lo cual aún no entra en vigencia debido a sucesivos aplazamientos.

La última prórroga se produjo en marzo del año pasado, cuando el Congreso decidió que, ante la crisis financiera internacional que ya empezaba a impactar a Paraguay, era mejor que comenzara a regir el 1 de enero de 2010.

El ministro de Hacienda, Dionisio Borda, fue uno de los ideólogos del IRP hace cinco años, cuando lo presentó el gobierno del entonces presidente Nicanor Duarte (2003-2008).

'Creo que por fin ya puede empezar a percibirse el Impuesto a la Renta Personal. Incluso el sector empresarial, que había propuesto la última postergación, ya tiene conciencia de la importancia de este gravamen para el sinceramiento de la economía', dijo Borda.

Descartó en declaraciones a Notimex que el gobierno vaya a firmar un acta de compromiso público con los gremios empresariales para dar a conocer la nueva reglamentación del tributo y aseguró que debe cumplirse el documento suscrito en 2003.

La Federación de la Producción, Industria y Comercio (Feprinco) lamentó en un comunicado que el gremio empresarial no haya sido invitado a firmar un acuerdo con el Ejecutivo para asegurar la implementación del IRP.

Borda aclaró que tal proyecto no existió, por lo menos de manera oficial y manifestó que el sector empresarial paraguayo es amplio y tiene varios sectores, algunos de los cuales propugnan un nuevo convenio con el gobierno y otros ya no ven esa necesidad.

El alto funcionario agregó que 'los empresarios ya no serán consultados para una eventual reglamentación del impuesto. Esa es, desde luego, una facultad privativa del gobierno y, si no surge otra traba parlamentaria, seguimos con la implementación'.