CIUDAD DE MÉXICO (05/ENE/2017).- Organismos empresariales unieron sus voces para pedir al gobierno presentar con celeridad un plan de acción para reactivar la actividad económica ante las presiones que habrá por el alza de los energéticos y el aumento de la inflación, además de condenar los actos de vandalismo y violencia que se registran con el pretexto del gasolinazo.Los empresarios de los diversos organismos agrupados en el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ya pidieron una reunión con el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, para buscar juntos medidas "paliativas" a fin de aminorar el impacto del gasolinazo e impulsar el consumo, expuso el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, Enrique Solana.En tanto, el presidente del CCE, Juan Pablo Castañón, hizo un llamado a las autoridades a brindar protección, a aplicar el estado de derecho y pidió un plan de incentivos para el desarrollo económico del país.“Los saqueos a tiendas comerciales y gasolineras, así como los bloqueos de carreteras, que afectan profundamente el clima social y violentan los derechos de los demás ciudadanos, son inaceptables y nada tienen que ver con el ejercicio de la libre expresión, responsable y pacífica”, aseguró.Para Castañón, es necesario que el gobierno federal integre un plan de incentivos para el dinamismo interno en la que el Ejecutivo haga compromisos en materia de reducción del gasto y la deuda pública.“Desde hace meses, el sector empresarial está haciendo un esfuerzo extraordinario para evitar repercutir las alzas de energéticos y la devaluación del peso en sus precios finales al consumidor. Es urgente emprender políticas que no sólo compensen las nuevas tarifas, sino que impulsen el desarrollo interno del país en momentos de incertidumbre internacional”, aseveró.Por su parte, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, condenó los actos de vandalismo que generan “grupos oportunistas” que utilizan como pretexto el incremento a los combustibles, ya que solamente desestabilizan el orden social y vulneran el estado de derecho.“Reiteramos el llamado al Gobierno de la República a dar muestras de sensibilidad política y diálogo con la sociedad para no sugerir resignación, sino proponer medidas concretas para atender el descontento social y un compromiso real traducido en acciones que fortalezcan la economía de las familias del país”, agregó De Hoyos.La Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas –que agrupa 220 centros de distribución en el país de donde se abastecen el 53% de la demanda nacional-- aseguró que comparten la inconformidad de los mexicanos por la falta de transparencia y el incremento desmedido en el precio de combustibles, energía eléctrica y gas LP, pero “reprobamos la violencia en cualquiera de sus manifestaciones”.Por lo anterior, pidieron la intervención inmediata de la autoridad para que se les garantice la seguridad y el libre movimiento para poder transportar los abarrotes.