CIUDAD DE MÉXICO (07/SEP/2016).- La confianza de los consumidores bajó en agosto por séptimo mes consecutivo, ilustrando además su mayor descenso desde marzo, afectada principalmente por la perspectiva que los hogares tienen respecto a la situación futura de la economía nacional.En comparación con agosto de 2015, el Índice de Confianza del Consumidor se redujo en cuatro por ciento, la baja más importante en cinco meses según apunta información ajustada por estacionalidad del INEGI.Por primera vez en cinco meses, todos los rubros de opinión de los consumidores registraron bajas en la percepción presente y futura que tienen los hogares. No obstante, por segundo mes consecutivo, la situación económica futura del país es el elemento con mayor percepción negativa.“Observamos un descenso muy acentuado en las expectativas que se tienen sobre el país”, afirmó Pamela Díaz, analista económico de Banco Ve Por Más. Explicó que particularmente las expectativas de los consumidores sobre la economía han sido afectas por el comportamiento del tipo de cambio, del precio del petróleo y el recorte en las expectativas de crecimiento por parte del gobierno.“Estos aspectos generan un entorno de expectativa económica para el país negativa en su conjunto. Sin embargo, ya se puede observar también cómo esta perspectiva se traslada a las perspectivas familiares, lo cual representa igualmente un riesgo sobre el consumo privado”, dijo.La opinión de los consumidores sobre cómo será la condición economía del país el próximo año comparada con la situación actual, observó una baja de 10.7 por ciento anual, hilando 14 meses de caídas continuas.La situación económica actual del país comparada con la de hace 12 meses arrojó una caída de 4.4 por ciento, acumulando siete meses en terreno negativo, mientras que la situación económica esperada para los miembros del hogar en el próximo año se redujo 3.6 por ciento, logrando permanecer un año en contracción.“Veo que sigue muy afectado este indicador tanto por la percepción que se tiene de la economía próximos 12 meses, como la percepción de hoy contra 12 meses antes”, expuso Rafael Camarena, analista económico de Banco Santander.El especialista señaló la posibilidad de que esta percepción esté contaminada por otros factores externos no necesariamente económicos, como temas de seguridad pública, por ejemplo. “Este tipo de inquietudes sociales que al final sí terminan afectando decisiones inversión y de consumo, son factores externos que terminan influyendo en el ánimo de los consumidores”, sostuvo.Las posibilidades actuales de los miembros del hogar para adquirir bienes de consumo durable como muebles y electrodomésticos cayeron por primera vez en cinco meses, 0.4 %.
