CIUDAD DE MÉXICO (15/NOV/2016).- Tras las elecciones en Estados Unidos, la embajada de México en el país vecino realiza ajustes para adaptarse al nuevo escenario e incluso han comenzado a plantearse retos como la deportación de inmigrantes indocumentados.“Nosotros nos estamos adaptando a esas realidades, a las que podemos enfrentarnos y que previamente habíamos identificado algunos de estos escenarios. Siempre hay cambios en lo que se dice en una campaña y lo que se hace o se puede hacer una vez que se toma posesión del cargo”, comentó Carlos Manuel Sada, embajador de México en Estados Unidos.Sobre los tres millones de inmigrantes indocumentados que podrían ser deportados por la administración de Donald Trump, el diplomático resaltó que no toda la cifra representa a ciudadanos mexicanos y mucho menos cuando se habla de personas con antecedentes penales.“No se apuntó que esos dos o tres millones de personas, no todos son mexicanos y conociendo la estadística de cómo está la situación de los 11 o 12 millones de indocumentados (actualmente en Estados Unidos) tampoco todos ellos son mexicanos”, precisó el funcionario durante la México Cumbre de Negocios 2016.El embajador también comentó que la llegada de Trump a la presidencia estadounidense dejará fuera el tema del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés), por lo que anticipó posibles negociaciones para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).Por su parte, Alan Bersin, secretario adjunto para asuntos internacionales del gobierno de Estados Unidos, comentó que un sólo país no puede manejar la frontera que existe entre ambas naciones y recomendó trabajar de manera conjunta, tanto para el paso de las personas como por el intercambio comercial.