Las ventajas de financiar tu educación

GUADALAJARA, JALISCO (08/AGO/2016).- La oferta educativa de las escuelas públicas no siempre encaja con las necesidades de los aspirantes. Ante esta situación, muchos jóvenes buscan estudiar en universidades privadas las cuales  requieren el pago de colegiaturas que pueden llegan a mermar la economía familiar. Una primera opción para reducir el gasto es estudiar y trabajar pero, en su mayoría, los trabajos para jóvenes sin estudios no significan mayor diferencia al momento de solventar una colegiatura.

Un mito frecuente entre los jóvenes estudiantes a punto de entrar a la universidad es que un financiamiento o crédito representarán una gran deuda luego de la titulación. Pero no pasa de ser eso: un mito. Una opción para reducir la cuota es recurrir a los créditos y financiamientos que las propias universidades ofrecen. Con estos modelos y sus variantes, el alumno  puede cursar la carrera pagando una colegiatura menor. De esta forma adquirirá los conocimientos respaldados por un título universitario, para posteriormente insertarse con facilidad en el mercado laboral y entonces sí, liquidar el costo restante de la educación.

Por parte de las instituciones educativas, uno de sus objetivos es abrir las puertas para que ingresen más estudiantes sin que la capacidad económica sea un impedimento. Un estudio socioeconómico para evaluar la situación financiera del estudiante y su familia suele ser un requerimiento común de las universidades antes de dar becas, créditos o financiamiento para su pago posterior. Algunos centros educativos, incluso, permiten combinar diferentes apoyos entre becas, crédito y trabajo de medio tiempo dentro de la universidad, para así apoyar al alumno y reducir más sus gastos. Además, cuando la universidad acoge a los estudiantes para trabajar de medio tiempo reafirma su compromiso de enriquecer el conocimiento adquirido en clases con la experiencia práctica laboral. En particular, la Universidad Tecnológica de México (UNITEC) tiene para sus aspirantes un programa de apoyo económico en el que las colegiaturas resultan más asequibles, así como una serie de modalidades financieras que se adaptan a sus necesidades.

Algunas variantes para reducir el costo de la colegiatura son:

• Becas: El porcentaje que se descuenta del pago a la colegiatura varía según el promedio del estudiante. Esto con el fin de estimular su mejor rendimiento.
• Trabaja mientras estudias: En este caso existen una diversidad de empleos y, en algunos casos, las universidades permiten laborar dentro de ellas para apoyar a sus alumnos a reducir el costo de la educación.
• Créditos Fonacot: La opción aplica si alguno de los padres o tutores del estudiante trabaja en una empresa con convenio Fonacot. Aquí se solicita un crédito para solventar los gastos académicos.
• Créditos y financiamientos tradicionales: Existen muchas opciones de financiamiento como pago a largo plazo (10 años), pagar montos con intereses fijos, pagar el saldo cuando el alumno se gradúe, o pagar mensualidades menores a la colegiatura desde el comienzo de la carrera y el saldo después.

Las últimas dos opciones representan una "deuda", pero con el plus de que el dinero no ha sido gastado, sino invertido. Es decir, el beneficio que obtendrán los alumnos se verá redituado al momento de ingresar a una empresa, con un mejor puesto o salario.

Según el tipo de beca, crédito o financiamiento, el monto puede ser hasta del cien por ciento del total de la carrera. Lo importante es no olvidar que la educación que brinda una universidad tiene un valor intangible mayor, que le permitirá al estudiante ir construyendo un mejor futuro.

Más información en: www.unitec.mx