Gobierno de Eslovenia, al borde del colapso financiero

LIUBLIANA, ESLOVENIA (26/ABR/2014).-El gobierno de Eslovenia está al borde del colapso a raíz de que la primera ministra Alenka Bratusek, cuyo gobierno salvó al pequeño estado de la Unión Europea de un rescate financiero internacional, perdió el sábado el liderazgo de su partido.

Zoran Jankovic, alcalde de la capital, Liubliana, fue elegido el líder del partido Eslovenia Positiva.

 Bratusek dijo antes de la votación en el congreso del partido que no puede encabezar el gobierno.

"Sin el respaldo de mi propio partido no puedo seguir siendo la primera ministra", destacó.

Jankovic, de 61 años, apeló a Bratusek después de la votación del partido el sábado por la madrugada para continuar como premier, diciendo que ha hecho un buen trabajo en la dirección del gobierno.

Los tres aliados de Bratusek en el gobierno de centroizquierda de cuatro partidos han dicho que renunciarían al gabinete si Jankovic, que ha estado bajo investigación, se convierte en líder de la organización. Si el gobierno colapsa en un voto de confianza en el Parlamento, es probable que las elecciones se realicen en junio.

Bratusek, experta en finanzas de 44 años, asumió el cargo en marzo del año pasado después que el previo gobierno de centroderecha colapsó por las acusaciones de corrupción y lentitud en las reformas. Su gobierno ha reducido el gasto público y comenzó a sanear los bancos a fin de no tener que echar mano a un rescate de la Unión Europea.

Las hipotecas de alto riesgo están en el centro de la crisis en la nación alpina de la eurozona, otrora considerada un modelo de la transición de Europa Oriental de la economía centralizada al libre mercado.

Jankovic, de 61 años, ha negado las acusaciones de corrupción planteadas por una organización contra el fraude.

La Lista Cívica, un aliado menor del gobierno de coalición, exhortó a realizar conversaciones de inmediato sobre el adelanto de la fecha de elecciones.

Jankovic, un empresario millonario, creó Eslovenia Positiva en el 2011. Aunque el partido ganó más votos en las elecciones parlamentarias el mismo año, no logró formar un gobierno de coalición después de la votación. Renunció a la dirección del partido en el 2013 a fin de permitir a su sucesora, Bratusek, formara el nuevo gobierno.