LONDRES, INGLATERRA.- La estadounidense Exxon Mobil acordó invertir posiblemente más de 600 millones de dólares en una empresa que desarrollará biocombustibles a base de algas, dijo el martes la firma, que previamente había descartado la energía renovable por considerarla poco rentable. Exxon dijo en un comunicado que creó una alianza de investigación y desarrollo con Synthetic Genomics Inc., una compañía privada enfocada en estudios genéticos. "Los carburantes basados en algas podrían ayudar a abastecer la creciente demanda mundial de combustibles para transporte a la vez que reducirían las emisiones de gases de efecto invernadero", explicó Michael Dolan, vicepresidente senior de Exxon. Otras compañías, incluyendo a la mayor petrolera europea por valor de mercado, Royal Dutch Shell, también estudian la posibilidad de producir combustible para motor a base de algas, pero todas concuerdan en que faltan años para que éste pueda ser comercializado. El biocombustible derivado de las algas tendría una ventaja clave sobre otros carburantes alternativos existentes, ya que no competiría con los cultivos alimenticios por tierra, lo que le permitiría abastecer la demanda energética sin elevar los costos de la comida. Exxon, la mayor petrolera de Occidente, había sido escéptica respecto a las energías limpias -como la eólica, los biocombustibles y la solar- y ha apoyado investigaciones que cuestionan las bases científicas de que el cambio climático es causado por el hombre. La compañía también rechazó las propuestas que alentaban las inversiones en combustibles renovables en su junta de accionistas de mayo.