Experta del IPN establece necesaria una nueva política de vivienda

CIUDAD DE MÉXICO (06/NOV/2010).- Georgina Isunza Vizuet, investigadora del Instituto Politécnico Nacional ( IPN), consideró urgente el diseño y aplicación de una política de vivienda que incluya la creación de nuevas figuras crediticias, accesibles para la adquisición de casas-habitación.  

La estudiosa del Centro de Investigaciones Económicas, Administrativas y Sociales (CIECAS) destacó que contar con lineamientos de vivienda evitaría un crecimiento urbano fragmentado -fraccionamientos cada vez más alejados de la ciudad-, con severos efectos ambientales y sociales.  

En un comunicado, indicó que tras realizar estudios sobre el rezago de la vivienda y el crecimiento urbano de la ciudad de México, se percató de que la política instrumentada en la materia ha provocado un crecimiento urbano indefinido y con la incorporación de espacios periféricos que propician una ruptura en el ciclo urbano.  

Hace años, apuntó, la ciudad crecía en grandes etapas, primero se presentaban asentamientos en las zonas urbanas y se densificaban con el incremento en el número de familias, hogares y la demanda de vivienda.  

Posteriormente, dijo, los asentamientos humanos en esas áreas se consolidaban como colonias populares, propiciando el desarrollo urbano.  

"En la actualidad no se espera a que las zonas se consoliden y urbanicen para incorporar nuevas áreas; se avanza de manera fragmentada y en pequeñas islas, por lo que se debe aplicar una política que regule la actividad inmobiliaria, a fin de que no sólo se produzca vivienda, sino ciudad", aseveró.  

Indicó que los fraccionamientos ubicados en municipios como Ixtapaluca, Tecámac, Chicoloapan, Zumpango, Huehuetoca y Tultitlán constituyen pequeñas islas de asentamientos diseñadas a partir de grandes consorcios habitacionales, de capital inmobiliario.  

"Los desarrolladores de vivienda no toman en cuenta los costos que representa la dotación de agua potable, el transporte, los servicios de drenaje, así como el deterioro ambiental propiciado por el incremento en el uso del automóvil -porque gran parte de los nuevos residentes trabajan en el Distrito Federal-, y por el cambio de uso de suelo".  

"Y es que los fraccionamientos se construyen en tierras de cultivo que compran a los ejidatarios a bajo costo", refirió.  

Para incrementar el número de personas con acceso a la adquisición de vivienda propia es importante que la nueva política propicie la modificación de las figuras crediticias, pues actualmente cerca de 62% de la población no tiene acceso a créditos hipotecarios.  

Lo anterior, debido a que es requisito tener ingresos de cuatro a 12 salarios mínimos y 58% de los trabajadores de la ciudad de México tienen percepciones entre 0 y tres salarios mínimos, en tanto que 4.1% no percibe ingresos, porque perdió su empleo o se encuentra en la economía informal.