SEÚL, COREA DEL SUR (14/OCT/2016).- La crisis ligada a sus teléfonos Galaxy Note 7 que estallan le costará más de tres mil millones de dólares en su resultado de explotación los próximos dos trimestres, aseguró Samsung.“El impacto negativo está estimado entre dos y tres billones de wones el cuarto trimestre de 2016 y un billón de wones el primer trimestre de 2017”, declaró el gigante surcoreano de la electrónica.Tras el fiasco monumental del Galaxy Note 7, la compañía trata de conservar su clientela ofreciendo a los usuarios de este fallido “tabléfono” un descuento en su próxima factura, si aceptan repetir con la marca surcoreana.Pero en su misma casa parece irle mal. Numerosos habitantes de Seúl continuaban devolviendo su Note 7, cuya producción fue frenada el martes, dos meses después de su lanzamiento, por defectos que pueden provocar la explosión del aparato que debía ser un producto de última generación.El primer fabricante mundial de teléfonos móviles pidió además el martes a todos los distribuidores dejar de vender el Galaxy Note 7.Los problemas con este nuevo aparato se traducen por una caída en tres días de 10% de capitalización bursátil de la marca, orgullo de la industria surcoreana, una pérdida de unos 20 mil millones de euros.La hemorragia bursátil recién se tranquilizó ayer, cuando el título terminó con un alza de 1.4 por ciento.El miércoles el grupo se vio obligado a anunciar una caída de un tercio en sus previsiones de beneficios operacionales tras el fiasco.La agencia Fitch Ratings estimó no obstante que el grupo surcoreano puede amortiguar las pérdidas relacionadas al Note 7.“Los daños a la imagen a largo plazo (...) son una amenaza mayor para su perfil de crédito que el impacto financiero directo”, explicó.Samsung es tan importante en Corea del Sur (el grupo representa 17% del PIB nacional) que el Banco de Corea tomó en cuenta sus problemas en el cálculo de sus previsiones de crecimiento para 2017 de una décima, de 2.9% a 2.8 por ciento. Retiran 10 mil 661 unidadesLa Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que a la fecha, en México, se han retirado del mercado 10 mil 661 celulares de las 14 mil 885 unidades entregadas por Samsung a su red de distribuidores autorizados Telcel, AT&T y Telefónica Movistar.Estas distribuidoras comercializaron 11 mil 659 unidades, sin ningún reporte y/o accidente confirmado hasta el momento.Señaló que los consumidores propietarios de un celular de estas características deberán apagar de inmediato su teléfono, detener su uso y acudir a los Centros de Atención a Clientes autorizados de su operador telefónico, donde podrán cambiar su Galaxy Note 7 por un Samsung Galaxy S7 Edge o cualquier otro dispositivo móvil de la marca.La dependencia refirió que el pasado 3 de octubre, la Profeco hizo un requerimiento de información a la empresa, a través de la Subprocuraduría de Telecomunicaciones para que informara la vía de compensación para los afectados por las fallas.Al respecto, informó que la empresa se encuentra en el plazo establecido por la Ley para responder, el cual vence el próximo sábado.La Profeco anunció que vigilará que se respeten los derechos de los usuarios que resulten afectados por la decisión de la empresa Samsung de sacar del mercado su modelo Galaxy Note 7.Además, respaldará las decisiones que tomen los consumidores sobre su cambio por otro modelo menor o la devolución de su dinero.
